Los Estatutos de la FIFA establecen una clara separación entre funciones estratégicas y de supervisión, por una parte, y funciones operativas y administrativas, por otra. El Congreso es el órgano supremo y legislativo de la FIFA. El Consejo es el órgano estratégico y de supervisión, y la Secretaría General es el órgano ejecutivo, operativo y administrativo de la FIFA. Las comisiones permanentes aconsejan y asesoran al Consejo y a la Secretaría General a cumplir sus tareas, mientras que las comisiones independientes realizan sus actividades y llevan a cabo sus obligaciones de manera totalmente independiente pero siempre en el interés de la FIFA y de acuerdo a los Estatutos y Reglamentos de la FIFA.