miércoles 22 marzo 2017, 09:11

La Fundación Sanneh y Silver Lining en Haití

Y la vida sigue, podemos tener un efecto en ella… pero tenemos que hacer algo.

Un grupo de personas vestidas de chándal y acarreando 15 enormes bolsas de hockey en la terminal del Aeropuerto Internacional Minneapolis-St. Paul parece una estampa bastante común y corriente. Sin embargo, esta historia en particular no tiene nada de ordinaria. En este caso, el grupo no se dirigía a defender un título o a disputar un torneo, sino a llevar esperanza a los niños a través del deporte rey.

Algo más de 340 kilos de equipamiento futbolístico, para ser exactos.

Dark Clouds, una de las peñas más veteranas del Minnesota United, tiene en marcha una iniciativa de carácter social denominada Silver Lining, que se ha unido a la Fundación Sanneh -una organización apoyada por el programa Football For Hope de la FIFA- para llevar material futbolístico nuevo a estrenar a los niños necesitados de Haití. La mercancía fue donada Football for Hope y la Fundación Sanneh. Seguro que a los lectores ese apellido les suena.

Tony Sanneh fue una cara habitual en la defensa de Estados Unidos en la Copa Mundial de la FIFA 2002™, en la que los hombres de Bruce Arena alcanzaron los cuartos de final. Sanneh puso en pie la fundación un año después de Corea/Japón, cuando aún era profesional.

En 2010, y tras colgar las botas, le consagró todo su tiempo, convirtiéndose en su presidente y director general. Fue ese mismo año, en 2010, cuando surgió Haitian Initiative, al ver Sanneh la destrucción que el terremoto de siete grados en la escala de Richter había sembrado en el país.

"Se trata de dar una oportunidad y esperanza", declaró Sanneh a FIFA.com sobre el trabajo de su fundación en el Caribe. "Si iba a hacer algo, ¿cómo conseguir que fuera sostenible? Básicamente nos dijimos, 'Si podemos hacer algo en el lugar más difícil, podemos repetirlo en cualquier parte'".

La Fundación Sanneh creó un programa anual en Cité Soleil, el barrio más pobre del país y uno de los más pobres del hemisferio occidental, para llevar esperanza a los niños a través del fútbol. Los programas en Cité Soleil han ido floreciendo en los últimos años.

Ahora los niños reciben formación dentro y fuera de la cancha, entrenando seis días a la semana, recibiendo alimentos diariamente y clases de inglés una vez por semana. El progreso de la fundación es incluso más alentador si tenemos en cuenta el contexto en el que Sanneh dio sus primeros pasos allí tras el devastador seísmo. "Estuvo todo cerrado seis meses", explicó. "No había escuela, había cadáveres por todas partes. Todo era una pila de escombros de tres metros de altura".

Sanneh visitó por aquel entonces Haití brevemente con el Galaxy de Los Ángeles, pero estaba decidido a hacer todo lo posible para dejar huella a largo plazo. Y aunque ya ha hecho mucho con la fundación, Sanneh aspira a dar a la gente de Cité Soleil algo de lo que sentirse incluso más orgulloso, como un centro cívico y una nueva cancha.

Dark Clouds Silver Lining echa una mano La cita que aparece al comienzo del artículo está incluida en uno de los vídeos en los que los miembros de Dark Clouds Silver Lining hablan de su último viaje a Haití, en el que se pusieron al servicio de la comunidad de Cité Soleil y entregaron material para la práctica del fútbol a los niños que viven allí.

Esto sirve para recordar que una peña futbolística puede ser mucho más que un grupo de aficionados que se juntan para animar a su equipo los fines de semana.

"Son auténticos y así debe ser la vida", apuntó Sanneh. "Todos deberíamos ver qué podemos hacer para hacer del mundo un lugar mejor. Una peña está al servicio de la comunidad, ¿no? No se trata solo de victorias o derrotas o de cuántos socios hay. Lo importante es lo que haces como organización. Es un modo de vida".

El trabajo de la Fundación Sanneh en Haití utiliza el fútbol como medio para transmitir esperanza y confianza a la gente de Cité Soleil.

"Lo mejor fue ver a los chicos (los integrantes de Silver Lining) salir de su zona de confort", comentó el exinternacional estadounidense. "Los muchachos sabían que los chicos estaban allí para ayudarles, y eso fue muy especial. Ver a adultos emocionarse ante la oportunidad de ayudar a otros y que diese resultado y decir 'Este es un momento de epifanía y de validación de todo lo que hacemos. Este es el motivo por el que lo hacemos'. Estuvo bien ayudarles a alcanzar ese pináculo".

"Vimos a gente salir totalmente de su zona de confort, hacer cosas que nunca hubiesen imaginado. Ya fuese conducir, enseñar inglés, intentar jugar al fútbol o entablar amistad con otras personas. Fue fantástico estar con ellos. Fueron infatigables en su esfuerzo. Aunque estuviesen cansados o directamente destrozados, si decías que había que hacer algo, decían, 'Nosotros lo hacemos, ¿qué necesitas?'. Eso fue muy especial".

"Son gente real haciendo cosas reales. No importa cuánto dinero tengas, siempre hace falta gente para llevar a cabo estas acciones. El poder de la gente es enorme".

Lo que están haciendo la Fundación Sanneh y grupos como Dark Clouds Silver Lining va más allá del mero hecho de donar equipamiento futbolístico a los niños.

"Sin respeto por ti mismo no eres nada", aseveró Sanneh. "Este deporte tiene la capacidad de unir a la gente y de permitirnos celebrar nuestras diferencias. Desde ese punto de vista, aporta confianza en uno mismo porque aporta respeto por uno mismo de manera natural. El orgullo, la autoestima y la conciencia de uno mismo son algo enorme, inconmensurable que mueve a la gente".

Sobre el papel, es la Fundación Sanneh la que enseña y ayuda a dar oportunidades. No obstante, el propio Sanneh ha aprendido muchísimo de la gente de Cité Soleil.

"He aprendido mucho sobre la esperanza y lo que es importante", concluyó. "He aprendido a perseverar y he aprendido a valorar lo que tengo. He aprendido a ser agradecido. He aprendido que todos los niños merecen una oportunidad".

Este artículo pertenece a la serie de reportajes de **FIFA.com **que ponen de relieve a las ONG que forman parte de Football for Hope, la iniciativa global de la FIFA para ayudar a mejorar las vidas de los jóvenes a través del fútbol.