sábado 16 julio 2016, 11:13

El fútbol de Samara, al alza

“El espíritu del fútbol está muy vivo en esta ciudad”, afirma Frank Vercauteren; y el entrenador del Krylia Sovetov de Samara sabe bien de lo que habla… La ciudad situada junto al Volga se prepara para recibir a los aficionados al fútbol de todo el mundo durante la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™ y sus habitantes tienen abundantes ejemplos a los que recurrir al hablar de la historia del fútbol local.

El Krylia Sovetov FC (el nombre significa literalmente “Alas de los soviéticos”) se fundó en 1942 durante la II Guerra Mundial, después de que los futbolistas de Moscú fuesen evacuados a Samara. Desde entonces, el club ganó 5 veces la liga de segunda división de la antigua URSS y, ya en la era postsoviética, ha logrado asentarse firmemente en la primera división rusa. Es más, en 2004, el equipo se aupó al mayor éxito de su historia adjudicándose la 3ª posición en la liga rusa.

El Krylia siempre ha gozado de un apoyo fervoroso por parte de sus aficionados; un factor que ha ayudado a atraer a auténticas figuras extranjeras, incluidas estrellas de la Copa Mundial de la FIFA como el delantero checo Jan Koller, el portero argelino Raïs M’Bolhi, el ghanés Larry Kingston y el sudafricano Matthew Booth.

“Puedo apreciar que la gente de aquí está realmente interesada en el fútbol, y no sólo en el de Samara”, señala Vercauteren a FIFA.com. “No hacen más que preguntarme por Bélgica; recuerdan grandes momentos en la historia del fútbol belga. También es muy agradable ver tantos jóvenes aficionados, porque el amor por el fútbol fluye por las familias de aquí, de padres a hijos y de madres a hijas”.

Ayuda procedente de Bélgica 

Al llegar 2014, no obstante, el club pasó por momentos difíciles y, por primera vez, descendió a la segunda división rusa. La misión de devolver al equipo a la máxima categoría se encomendó a Vercauteren, un jugador clave en la brillante 4ª plaza obtenida por Bélgica en México 1986 (el mejor resultado de su país en una fase final mundialista).

¿Pero podría considerarse la segunda división rusa un paso atrás en la carrera de un entrenador en cuyo currículo figuran los banquillos de Anderlecht, Genk, Sporting de Lisboa y la selección de Bélgica? “Marcharme a la segunda división rusa no me avergonzó en absoluto, pues el club me demostró que tenía un proyecto ambicioso”, puntualiza Franky.

“Lo que más me llegó fue su deseo imperioso de regresar a la máxima categoría. Para mí, era mucho más interesante perseguir un título que estar luchando por quedar 12º o 13º. Por eso acepté esta oferta”, explica.

Y una sola temporada le bastó al técnico belga para guiar al conjunto de Samara de vuelta a la primera división rusa... “Personalmente, me resultó agradable descubrir que los jugadores rusos acatan cualquier tipo de instrucciones en el entrenamiento sin rechistar”, resalta. “Cuando tienen que trabajar en el gimnasio, no hay problema; cuando tienen que repetir series corriendo, tampoco hay problema”.

“Lo que dice el entrenador vale, sin quejas”, continúa. “Tienen una actitud muy profesional, lo cual no siempre ocurre en otros países. La otra cara de la moneda es que simplemente harán lo que diga el entrenador. Algunas veces esperas entablar un diálogo, pero te encuentras con que es un monólogo…”.

La pasada campaña, en su regreso a primera división, el Krylia no sólo mantuvo el tipo sino que también se cargó a algunos equipos grandes, registrando triunfos memorables sobre el CSKA de Moscú y el Zenit de San Petersburgo de camino a la 9ª posición final. “Fue genial que ganásemos partidos contra equipos como el CSKA y el Zenit: esos fueron momentos realmente grandiosos”, afirma Vercauteren.

“Por otro lado, deberíamos haber sumado más puntos contra equipos ‘más débiles’”, matiza. “Probablemente podríamos haber acabado más arriba. Sin embargo, teniendo en cuenta que era nuestra primera temporada de vuelta en la división de honor, estoy satisfecho”.

Cambios positivos

La nueva campaña liguera arrancará en breve, y Vercauteren y sus hombres aspiran a hacerlo mejor todavía esta vez. “Tenemos un buen equipo y, cuando digo ‘equipo’, me refiero a jugadores que se conocen muy bien, que son disciplinados y están bien organizados, especialmente en defensa. Tal vez no seamos aún el equipo más atractivo desde un punto de vista ofensivo, pero trabajaremos para ello en la próxima temporada”.

El Krylia está dispuesto a volver a afianzarse con fuerza en la primera división rusa. Para ello, contará con la ayuda de un nuevo estadio, el Samara Arena, que se está construyendo para el Mundial de 2018. “Puedo ver muchas cosas cambiando a mejor según nos vamos aproximando al Mundial”, indica Vercauteren, sobre la repercusión que ya ha tenido la gran fiesta futbolística de 2018 en la ciudad. “El aeropuerto ha cambiado mucho en un año, las carreteras han mejorado mucho ahora, y están apareciendo edificios nuevos por doquier. Se han producido muchos cambios positivos desde que vine por primera vez a Samara”.

Es más, a los aficionados que vengan en 2018 desde todos los puntos del planeta no les faltarán cosas interesantes que hacer en Samara. “Dado su tamaño, no puede esperarse comparar a Samara con Moscú o San Petersburgo, pero todo el que venga aquí descubrirá una floreciente vida social, buena comida y espacios naturales preciosos”, concluye Vercauteren. “Hay muchísimos lugares interesantes que explorar; sobre todo si les das a los lugareños la oportunidad de mostrártelos”.