sábado 12 noviembre 2016, 05:53

La quinta fue la vencida para el Tri

Durante 15 años, México no conoció en Colombus otro resultado más que el amargo sabor del 2-0 en contra. Para el hexagonal rumbo a la Copa Mundial de la FIFA Corea/Japón 2002, Estados Unidos buscó una nueva fortaleza para enfrentar al Tri. Y acertó al elegir a la capital de Ohio, donde el clima y las gradas le han resultado siempre hostiles a los mexicanos.

Rafael Márquez estuvo presente aquel 28 de febrero de 2001, cuando cayeron por primera vez. Y fue testigo también de las derrotas en el camino a Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, cuando Las Barras y Las Estrellas les calcaron cuatro veces la maldad. Fue hasta la eliminatoria rumbo a la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™ cuando el eterno capitán y emblema de México dijo basta y rompió el hechizo este 11 de noviembre.

Con la complicidad de Miguel Layún Partido de ida y vuelta, muchas emociones, tensión en cada balón dividido. En la primera parte México había presionado más, y, cuando el cronómetro anunciaba los 20 minutos, encontraron la recompensa. Miguel Layún recuperó una pelota brevemente perdida en los linderos del área rival. De inmediato se perfiló y, sin pensarlo dos veces, tiró, anotó e inició la gesta.

En la segunda mitad el panorama se complicó para los mexicanos. Bobby Wood les ocultó el sol cuando anotó con un remate de pierna izquierda entre dos defensores. Entonces EEUU se lanzó con todo al frente y los asfixió buscando los tres puntos. Fue ahí cuando apareció Rafael Márquez al 89’, de cabeza en un tiro de esquina cobrado a primer poste por un incombustible Layún que nunca se cansó de subir y bajar.

"Ese gol de la victoria se hizo con un gran esfuerzo; veníamos a tratar de escribir una nueva historia. Nos da mucha confianza y motivación para seguir por este camino e ir a conseguir tres puntos a cualquier sitio. Se tiene que ir mejorando. Grité con todo el corazón el gol; lo disfruté como hace tiempo no lo hacía”, declaró Márquez.

Es cierto. Desde el punto de vista de las matemáticas, son sólo tres puntos. Faltan todavía 9 partidos y muchos meses para conseguir la clasificación mundialista. Pero la victoria en tierras estadounidenses le servirá a México como motivación para sacudirse el recuerdo de la derrota ante Chile en la Copa América Centenario 2016 y hacer más fácil una cuesta en donde también está la Copa FIFA Confederaciones Rusia 2017.

"La historia no se cambia, pero sí se hace historia. El 7-0 ahí queda, como el triunfo ante Estados Unidos esta noche. El resultado fue justo, ya que EEUU es un gran rival. Ahora a prepararnos para enfrentar a Panamá", opinó el seleccionador Juan Carlos Osorio.