sábado 11 junio 2016, 13:32

México asiste a la gesta de los Leones del Atlas

Marruecos no fue el primer país africano en obtener la clasificación para la Copa Mundial de la FIFA™ —ese honor corresponde a un rival norteafricano suyo, Egipto—, pero este 11 de junio celebra la consecución de otro récord histórico: hace 30 años, los Leones del Atlas vencieron por 3-1 a Portugal y se convirtieron en la primera selección africana que alcanzaba la fase de eliminatorias del Mundial. FIFA.com repasa una de las historias más memorables de México 1986.****

Asombrar al mundo El cuadro magrebí acudió a México con un plantel formidable. Dos años antes había participado en el Torneo Olímpico de Fútbol celebrado en Los Ángeles, en un grupo que también incluía a Alemania Occidental y Brasil. “Después de viajar a las Olimpiadas, teníamos la ambición de clasificarnos para el Mundial”, explica a FIFA.com Mustafa el Haddaoui, veterano de las ediciones mundialistas de 1986 y 1994. “Y contábamos con una nueva generación, con hombres como Badou Zaki, Aziz Bouderbala, Mohammed Timoumi, Abderrazak Khairi, Krimau y yo”.

Esa generación dorada consiguió acceder al torneo tras superar a Sierra Leona, Malaui y dos rivales regionales, Egipto y Libia, y una vez allí quedó englobada en un grupo sumamente exigente, con Polonia, Portugal e Inglaterra. Para competir con garantías en su segunda participación en el Mundial, tras México 1970, los marroquíes realizaron una concentración de 40 días en Monterrey, sede de su primer encuentro de la liguilla, frente a Polonia.

“Teníamos un seleccionador muy experimentado, el brasileño José Faria, y quería que nos aclimatásemos. Jugamos muchos amistosos contra distintos clubes y estudiamos mucho a nuestros rivales de la primera fase. Teníamos una ventaja: conocíamos a sus jugadores, mientras que ellos no nos conocían muy bien a nosotros. En aquella época era bastante difícil hacerse con información de otros equipos”.

Los marroquíes demostraron ser un hueso duro de roer, y acabaron adjudicándose el grupo, protagonizando así una de las grandes sorpresas del Mundial. “Teníamos la impresión de que los oponentes nos tomaban un poco a la ligera, de que les sorprendía encontrarse con un equipo tan bien organizado como el nuestro, y con buenas individualidades. Empatamos a cero en los dos primeros partidos, contra Polonia e Inglaterra, y luego nos esperaba Portugal, en un choque que los dos equipos tenían que ganar para seguir adelante. Lo hicimos nosotros, por 3-1, y nos clasificamos. Vernos superar la liguilla fue una sorpresa enorme para todo el mundo, sobre todo porque Portugal había vencido antes a Inglaterra”.

El siguiente adversario de los Leones del Atlas, ya en las eliminatorias, era Alemania. El partido se jugó con un calor extremo, y los marroquíes conservaron el 0-0 inicial hasta dos minutos antes del final, cuando Lothar Matthaeus transformó un lanzamiento de falta. A los jugadores marroquíes todavía les escuece aquel revés. “No resultó fácil asumir la derrota, porque fue un gol que pudimos evitar, y tuvimos la oportunidad de ganar el partido", rememora El Haddaoui. "Los alemanes acusaron el calor. Parecía que se estaban asando, pero creo que nosotros estuvimos a su altura, y el partido fue equilibrado. Aunque perdimos, el pueblo marroquí estuvo orgulloso de nosotros. Cuando volvimos se organizó un desfile al que asistieron 100.000 personas”.****

El legado de un León Ese éxito histórico sirvió de inspiración a las futuras generaciones del fútbol marroquí, y El Haddaoui fue el capitán de la joven selección que participaría, ocho años después, en EEUU 1994. “El equipo tenía mucha calidad, individualidades muy buenas, como Naybet y Mustapha Hadji. Pero no nos preparamos tan bien como en 1986, aunque sí tuvimos una concentración, en Canadá. También hubo algunos problemas internos. Perdimos todos los partidos de la fase de grupos y quedamos eliminados, pero fue una experiencia positiva para los jugadores, ya que cuatro años más tarde se clasificaron para Francia”.

El Haddaoui sigue en contacto con muchos de los integrantes del plantel de 1986, en reuniones sociales y participando en partidos y exposiciones. También ha dirigido a varias selecciones de su país de categorías inferiores, el combinado olímpico y un conjunto compuesto por futbolistas de la liga nacional. Actualmente es Presidente de la Unión Marroquí de Futbolistas Profesionales.

Está convencido de que Marruecos puede regresar al Mundial a las órdenes del nuevo seleccionador, Hervé Renard. “Traer a Renard ha sido un acierto. Conoce muy bien África. Tiene carisma, experiencia. Es un verdadero líder. Y en esta selección hay jugadores buenísimos, así que creo que tenemos motivos para el optimismo”, concluye.