Todos quieren evitar al Sundowns en semis

Si el Wydad Casablanca quiere ganar el Grupo A de la Liga de Campeones de la CAF y esquivar así en la semifinal al irrefrenable Sundowns, campeón de Sudáfrica, tendrá que poner fin a la buena racha del Zesco United en Ndola.

El club zambiano, que lleva acumuladas siete victorias consecutivas en casa en la Liga de Campeones de la CAF, no ha perdido todavía en su estadio en sus ocho campañas en esta competición. En total, ha disputado 16 partidos ante su propia afición en la Liga de Campeones, de los cuales ha ganado 11 y ha empatado cinco, con 26 goles a favor y sólo siete en contra.

Sin embargo, su visitante marroquí ocupa en la actualidad el primer puesto del grupo, con 10 puntos, y sabe que un empate en Zambia lo afianzaría en esa posición por delante del Zesco, que posee ocho puntos.

El conjunto zambiano llegará al encuentro del miércoles muy motivado tras su contundente victoria por 4-0 en la liga contra el Power Dynamos. Jackson Mwanza y el mediocampista Cletus Chota anotaron dos tantos cada uno para el Team Ya Ziko. El éxito del Zesco en la Liga de Campeones, donde se convirtió en el primer club de Zambia que se plantó en unas semifinales de la competición, no ha pasado inadvertido a los directivos del fútbol de este país del sur de África. “Estamos orgullosísimos del Zesco. En los últimos cuatro o cinco años, se ha situado en la vanguardia y ha aupado al fútbol zambiano a más altas cotas”, ha declarado el secretario general de la Asociación Zambiana de Fútbol, Ponga Liwewe.

El Wydad tuvo que recurrir a un tanto in extremis de Fabrice Nguessi Ondama para imponerse al ASEC Mimosas por 2-1 en casa en su último partido, y ahora confiará en el delantero congoleño para incrementar su casillero de goles. Sin embargo, los visitantes no han podido convocar hasta el momento al internacional liberiano William Jebor, quien acaba de fichar por el club, recomendado por el legendario George Weah. Sin embargo, el delantero nigeriano Chisom Chikatara, también fichado recientemente, se encuentra en la partida.

Por el orgullo El miércoles, en el otro partido del grupo, el ya eliminado Al Ahly se desplazará a Costa de Marfil para enfrentarse al Mimosas y jugará sólo por el orgullo de no convertirse en el farolillo rojo de la tabla. El coloso de El Cairo va actualmente tercero, con cinco puntos, mientras que el ASEC posee cuatro.

Los preparativos del Ahly cambiaron para peor el jueves, cuando su entrenador, el holandés Martin Jol, abandonó el cargo tras un enfrentamiento con los aficionados a raíz de que el equipo quedara eliminado de la competición. Lo sustituirá temporalmente su ayudante Ossama Orabi, a quien seguramente le costará bastante conseguir que sus hombres se concentren en el juego después de las protestas de la afición y del parón en los entrenamientos.

Mamelodi Sundowns, por su parte, no sufre presión alguna antes de su viaje a Nigeria para el encuentro del martes con el bicampeón Enyimba en el Grupo B. Los nigerianos ya han quedado eliminados, mientras que el Sundowns sabe que tiene ganado el grupo antes de su último choque. Los brasileños, como se conoce al equipo sudafricano, poseen nueve puntos en tres partidos, mientras que el Zamalek, con el segundo puesto garantizado, tiene seis puntos. El Elefante del Pueblo todavía no ha inaugurado su casillero.

El* internacional Bafana* Sibusiso Vilakazi fichó por el Sundowns procedente del Wits, pero no podrá saltar al terreno de juego con su nuevo equipo, pues ha jugado en la Copa de la Confederación este año. Vilakazi está seguro de que sus nuevos compañeros podrán llegar a la final. “Hasta el momento, todo está saliendo a pedir de boca, pero ahora en las semifinales debemos subir el listón y poner toda la carne en el asador, porque se trata de una ronda crucial”.

"Es importante mantener la concentración y seguir participando y ganando , para no perder el ritmo de jugar con regularidad”, comentó.

El Sundowns se enfrentará al segundo clasificado del Grupo A, mientras que el Zamalek se verá las caras con el campeón de ese grupo.