viernes 19 octubre 2018, 08:28

August 'Agge' Rosenmeier

  • Entrevistamos a August 'Agge' Rosenmeier, leyenda danesa del FIFA

  • Habla de su primer contrato y su paso por clubes como PSG o Copenhague

  • Sus claves: "dedicación, pasión y mucho esfuerzo"

Fue campeón en 2014 y ha participado en seis ediciones de la Gran Final. August Rosenmeier es, desde hace años, uno de los jugadores más laureados y constantes del FIFA. Hablamos con él de sus inicios, de su nuevo club y de sus participaciones en la Gran Final.

¿Quién te inició en el videojuego del FIFA? Es una historia muy curiosa que siempre me gusta contar. Mi hermano se compró una PlayStation y el juego del FIFA 2002. Enseguida me aficioné y, siempre que volvía a casa antes que él, me metía a escondidas en su cuarto para jugar. Un par de años más tarde ya era bastante mejor que él, y me inscribió en un torneo de clasificación del campeonato danés. Después llegó mi primera participación en una Gran Final, la de Dubái. Y, tras mi segunda participación consecutiva, me ofrecieron mi primer contrato.

Acabas de firmar un contrato con el “The North”/FC Copenhague. ¿Qué significa para ti dar este paso? Significa muchísimo. El Hashtag United era como una familia. Allí me ayudaron a recuperar mis ganas de jugar y me apoyaron para que volviera a ser el mejor. Estoy muy agradecido a Spencer Owen y a toda la gente del Hashtag United por los grandes momentos que hemos vivido juntos. Ahora, tener un empleo a jornada completa en Copenhague, poder ver a mi familia y a mis amigos y jugar al fútbol en un equipo es muy importante para mí. Contar con una estructura sólida para poder jugar lo mejor posible es algo que se suele subestimar.

Has dicho que tu hermano es un ejemplo para ti. ¿Por qué? Le estoy muy agradecido por haberme inscrito para mi primer torneo, porque me dio la oportunidad de demostrarles a otros mis cualidades. Siempre me da consejos y, después del título que conseguí en Río de Janeiro, me ayudó a seguir esforzándome y a seguir siendo yo mismo. Sin él no habría tenido una carrera con tantos éxitos. Lo importante no es solamente lo bueno que seas, sino cómo te comportas fuera de ese mundo. Y él me ayudó mucho en ese aspecto.

¿En qué medida ha cambiado tu vida el FIFA? Nunca imaginé que llegaríamos a un punto en el que este mundo fuera tan grande como lo es ahora. Cuando firmé mi primer contrato, era un buen trabajo para compaginar con mis estudios. Pero, de pronto, empezaron a jugarse más y más torneos y ya pude tomarme esto como un trabajo a jornada completa, algo que pude hacer gracias al París Saint-Germain. En estos momentos son muchos los jugadores que participan en torneos de este tipo, y tanto la FIFA como EA Sports han conseguido proporcionar una buena plataforma y una buena estructura.

También juegas al fútbol de verdad. ¿Dónde lo haces y cómo llevan en tu club que también te dediques al fútbol virtual? Juego en la cuarta división del fútbol danés, y la verdad es que no es fácil encontrar el equilibrio entre ambos. Somos un equipo pequeño, pero nos va muy bien y nos gustaría subir de categoría. A veces cuesta compaginar el FIFA y el fútbol al aire libre, porque viajo mucho con las Series Globales.

La racha de imbatibilidad debe continuar. A la siguiente ronda de la Copa Nacional

¿Cómo fue tu primera Gran Final? En 2012, en Dubái, todavía era un participante absolutamente desconocido. Fue alucinante jugar en una ciudad tan increíble, y todo era muy nuevo para mí, empezando por el hecho de tener tan cerca el título de campeón del mundo. Aprendí mucho de aquella experiencia y estoy encantado de haberme podido clasificar para otras ediciones de la Gran Final.

¿Qué fue más importante para ti: clasificarte por primera vez para la Gran Final o tu regreso en la edición de 2018, después de un año complicado? Ambas fueron muy importantes. La primera Gran Final fue la más importante para mí, pero, por otro lado, clasificarme para la Gran Final de 2018 me permitió demostrar que seguía estando entre los mejores. La manera en que me clasifiqué también lo hizo todo más especial. Me cuesta decantarme por una u otra, pero clasificarme para la Gran Final de Dubái fue muy especial. Eso sí, valoro muchísimo ambas participaciones.

¿Cuál ha sido la mejor Gran Final que has jugado? En Río de Janeiro tuve el presentimiento desde el principio de que iba a ganar. En Dinamarca decimos que las cosas buenas siempre vienen de tres en tres, y todas las piezas del puzle encajaron a la perfección. Llegaba muy bien preparado y conquistar el título fue muy emotivo. Fue, sin duda, uno de los mejores momentos de mi vida, algo que nunca olvidaré.

¿Y cuál ha sido tu mayor tropiezo en una Gran Final? No sabría decir si la del 2015 o la del 2016. Siempre me pregunto cómo, en 2015, no logré convertirme en el primer jugador en encadenar dos títulos consecutivos. Gané casi todos los partidos, pero no gané el torneo. Sin embargo, en 2016 la decepción fue aún mayor, porque había dominado casi todo el año. Caer eliminado en la fase de grupos fue un fiasco, sobre todo porque sabía que podía haberlo hecho mejor.

¿Qué diferencias encuentras entre tu primera y última Gran Final? Ahora los jugadores están mucho más concentrados en los partidos y en los torneos. Este año, el marco era extraordinario y todo lo que rodeaba al evento había mejorado: teníamos una zona para nosotros, había muchos árbitros y mucho más público. Y esto es solo el principio de algo que será mucho más grande en el futuro.

¿Quién dirías que es una leyenda del FIFA? Hay muchos jugadores. Bruce Grannec me sirvió de inspiración y me enseñó a comportarme, tanto en las victorias como, sobre todo, en las derrotas. Es uno de los jugadores más humildes que hay y su deportividad es máxima. Otro es Ivan Lapanje, un buen amigo mío que en su día me protegió mucho. También está Spencer Ealing. Hay pocos jugadores que le dediquen más tiempo a esto y, además, revolucionó el juego con su estilo vistoso y agresivo. Y Alshehri es un jugador al que respeto muchísimo. Es una gran persona y un jugador sobresaliente.

El tiempo vuela, la amistad crece y se fortalece. ¡Feliz cumpleaños, @Hashtag-Boras! Para mí es un privilegio tenerte como un buen amigo y poder mirar hacia atrás y ver cuántos recuerdos tenemos juntos (con otros por venir). Te deseo el mejor día, hermano.

Hemos tenido dos campeones daneses en los últimos cuatro años, y el Brondby suma ya dos títulos de campeón de la FeCWC. ¿Por qué es tan potente la comunidad de jugadores daneses? La comunidad danesa es fantástica. La gente se conoce muy bien, todos tienen muchas ganas de mejorar y tenemos muchos torneos locales. Somos, en general, un país muy volcado con los deportes electrónicos. Hay algunas carreras, por ejemplo, que ya te permiten jugar a nivel profesional. Tanto la estructura como la comunidad son muy buenas, y tenemos jugadores jóvenes con muchas ganas y mucho talento.

¿Qué consejos les darías? Dedicación, pasión y mucho esfuerzo. Esos son mis tres consejos principales. Hay que dedicarle mucho tiempo, sobre todo los fines de semana, porque aprendes mucho al competir contra otros jugadores de nivel. También es muy importante participar en torneos locales, porque ahí ya notas que la presión es distinta. Además, hay que ser fuerte mentalmente y tener cuanta más experiencia, mejor.

¿Quién podría ser la gran estrella en el 2019? Hay un jugador que tiene potencial para hacerlo. Es una grandísima persona y tiene la mentalidad adecuada. No es otro que Ryan Pessoa, del Hashtag United. Me ha impresionado mucho, porque siempre mantiene la calma. Otro podría ser 'Marcuzo'. Casi nunca pierde contra los mejores.

¡Vice-campeón mundial en PS4! Qué año has tenido, hermano. Estamos todos muy orgullosos de ti, y ha sido inspirador ver el crecimiento de tu carácter y tu juego en los dos últimos años. Esto es solo el principio. Te levantarás con ese trofeo en el futuro.