viernes 08 abril 2016, 06:49

Azmoun, la irrupción del Messi iraní

En opinión de la afición de Irán, han pasado ya bastantes años desde que el Equipo Melli disfrutó de los servicios de un goleador fiable tras el retiro del máximo anotador internacional, Ali Daei. Una carencia que quedó patente en el rendimiento de la selección durante la última ronda de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™, donde el combinado de Carlos Queiroz pasó a la fase final con el peor registro anotador de las cuatro selecciones clasificadas del continente: sólo ocho goles en otros tantos partidos. Su campaña en Brasil 2014 también resultó decepcionante en este sentido, pues los iraníes vieron puerta en una sola ocasión.

En la actualidad, sin embargo, con el ascenso meteórico de Sardar Azmoun, todo apunta a que el vacío que dejó el máximo anotador internacional del mundo está a punto de llenarse. Siete tantos en cinco encuentros es el impresionante registro con el que el delantero del Rostov, que cumplió 21 años en enero, terminó la segunda ronda de la clasificación asiática para Rusia 2018.

Unos números que lo convierten en el máximo anotador del equipo. Azmoun completó además su primer doblete internacional en la goleada por 6-0 contra Guam, antes de convertirse en el autor de los dos tantos de los suyos en la victoria por 2-0 sobre Omán, en el último partido del grupo, que otorgó a Irán el pase a la siguiente fase.

Gracias a esta prolífica forma, Azmoun está considerado una estrella en ciernes. Sin embargo, mientras sus seguidores confían en que tome el testigo de Daei, el delantero opta por rebajar las crecientes expectativas.

"Lo intentaré ", asegura a FIFA.com. "Pero, sinceramente, no quiero preocuparme tanto por los goles. Lo que yo quiero es ayudar a Irán, y me siento orgulloso de anotar para mi equipo. Soy joven todavía y debo concentrarme en perfeccionar mi fútbol".

Confianza de Queiroz Pocos conocían a Azmoun cuando Queiroz sorprendió hace un año con la inclusión del joven en la convocatoria para la Copa Asiática de la AFC 2015. Sin duda, los incondicionales del fútbol iraní sabían bien de qué era capaz el jugador tras haber visto sus hazañas con el Rubin de Kazán, el equipo ruso por el que fichó cuando era prácticamente un niño, en 2013. En los 32 partidos que disputó con el Kazán en todas las competiciones, marcó un total de ocho goles, incluido aquel primero en la victoria por 3-0 contra el Molde en la Europa League de la UEFA.

"El seleccionador me convocó ", recuerda. "Puso mucha fe en mí. La convocatoria no me sorprendió, porque llevaba un tiempo pensando que me llamaría, y así fue".

En los escenarios continentales, no tardó Azmoun en darle la razón a Queiroz. Tras jugar unos cuantos minutos como suplente en el primer choque de Irán, saldado con victoria contra Bahréin, recibió la titularidad contra Qatar. Azmoun no desaprovechó la ocasión y recompensó la fe que el seleccionador había depositado en su persona al anotar el gol de la victoria.

A continuación, inauguró el marcador en cuartos de final contra Irak, una eliminatoria en la que se mantuvo el empate a tres hasta el final de la prórroga y que se saldó con victoria del rival en la tanda de penales. A pesar de la derrota, Azmoun se convirtió en una de las grandes revelaciones del torneo, junto con Massimo Luongo y Omar Abdulrahman.

"Fue una satisfacción enorme jugar con la selección en un torneo tan importante", afirma al recordar su primera gran competición en las filas de Irán. "Mis sueños se hicieron realidad, y esto me proporcionó confianza y motivación".

Messi o Ibrahimovic El rendimiento de Azmoun con su club está resultando igual de impresionante. Desde que llegó cedido al Rostov a principios del año pasado, sus internadas y sus goles han encandilado a los espectadores. Sus magníficas actuaciones lo han incluido entre las jóvenes promesas más codiciadas de Asia, y los rumores apuntan a que grandes clubes, como el Everton, el Stoke City e incluso el Barcelona, han expresado interés por hacerse con sus servicios.

Su creciente popularidad es tal que entre los aficionados y la prensa se le conoce con el sobrenombre de El Messi iraní. Azmoun, no obstante, piensa de otra manera. "Zlatan Ibrahimovic es mi ídolo", revela. “Y el Real Madrid, mi club preferido”.

Dueño de una constitución atlética en sus 182 cm de estatura, Azmoun posee una habilidad excepcional para el juego aéreo, un control consumado, y una aceleración, creatividad y puntería deslumbrantes. "Azmoun reúne todas las cualidades para convertirse en un delantero de primerísima categoría", comentó su antiguo entrenador en el Rubin de Kazán, Rinat Bilyaletdinov.

Con tanto como promete, Azmoun es muy consciente de la labor titánica que le espera. “Todos los futbolistas quieren dar lo mejor con su selección nacional, y yo no soy una excepción”, manifiesta. “Mi objetivo principal es ayudar a Irán y hacer felices a nuestros seguidores. Para conseguirlo, no puedo olvidarme de que debo trabajar muy duro”.