lunes 20 junio 2016, 09:03

Guinea-Bissáu, el último cuento de hadas africano

Si el fútbol fuese predecible, la modesta Guinea-Bissáu no estaría atareada en estos momentos organizando su viaje a la Copa Africana de Naciones que se celebra en enero en Gabón. Sin embargo, después de protagonizar uno de los éxitos más increíbles que se recuerdan en los clasificatorios, los Djurtus participarán en su primera fase final continental. Sellaron su billete en un grupo sumamente complicado, y lo consiguieron además en un emocionante final.

Un tanto agónico de Toni Silva en el minuto 90 les sirvió para ganar 3-2 en su penúltimo compromiso del Grupo E a Zambia, campeona de África de 2012, y dotarse así de una ventaja ya inalcanzable de cuatro puntos al frente de la tabla, culminando una remontada asombrosa. Transcurridas dos jornadas, la selección guineana únicamente había sumado un punto, y estaba a tres de los líderes, Zambia y el Congo.

Sin embargo, a continuación cosechó dos victorias por 1-0 sobre Kenia, que, como explica su capitán, Bocundji Ca, a FIFA.com, hicieron que el equipo se diese cuenta de lo que era capaz. “Contra Kenia todos se entregaron al máximo, desplegando todo su potencial”.

Zambia y el Congo no pudieron sumar más que dos puntos en esas jornadas, al empatar sucesivamente entre sí, y los Djurtus se encontraron de repente en una posición en la que nunca se habían visto: con verdaderas opciones de alcanzar la fase final de la Copa Africana de Naciones. Ca, centrocampista que milita en el París FC, dice que el equipo no se inmutó ante lo que había en juego. “Incluso contra Zambia desplegamos la misma determinación que habíamos mostrado contra Kenia. Ni siquiera nos planteamos el empate, lo único que queríamos era ganar a toda costa. Era la primera oportunidad de nuestra historia de ir a la Copa Africana de Naciones y sabíamos que no podíamos dejarla escapar”.

Y esta pequeña nación del oeste de África, ubicada entre Senegal y Guinea, cerca de Gambia, estuvo a la altura. Se adelantó gracias a un penal transformado por Zezinho, aunque Collins Mbesuma empataría poco después para los campeones de 2012. El delantero Frederic Mendy, que se estrenaba con Guinea-Bissáu, devolvió la ventaja a los suyos antes del descanso, pero los Chipolopolo igualaron de nuevo, esta vez por mediación de Christopher Katongo.

Y con un público que abarrotó el estadio de Bissáu y se volcó con su equipo, Silva, otro debutante, materializó el gol de la victoria en el último minuto de la contienda. La alegría de derrotar a Zambia se convirtió en euforia un día más tarde, cuando Kenia logró frente al Congo el resultado que más favorecía a los Djurtus, un triunfo por 2-1, certificando así su histórica clasificación.

Una combinación ganadora Ca afirma que el camino hacia Gabón no resultó fácil. “Hubo partidos muy duros y complicados. No fue sencillo, pero tenemos un verdadero espíritu de equipo, ahí radica nuestra fuerza. Todo el mundo contribuye a la defensa, incluso los atacantes. Presionamos mucho a los rivales. Atacamos y nos defendemos juntos. Puede parecer algo básico, pero hace dos años no lo hacíamos. Esta solidaridad inquebrantable es nuestra mayor virtud. Y la afición también forma parte de eso”.

El país es una antigua colonia de Portugal, pero no todos los integrantes del plantel hablan portugués. Aun así, Ca no lo considera un obstáculo. “Hablemos portugués o español, todos estamos en la misma onda”.

Su seleccionador es Paulo Torres, integrante de la célebre generación dorada del fútbol portugués y vencedor del Campeonato Mundial Juvenil de la FIFA 1991. “No es un técnico que hable mucho, es una persona tranquila, pero le dedica mucho tiempo a cada jugador individualmente, explicándonos a cada uno de nosotros lo que quiere. Es muy profesional. Así que sentimos confianza y apoyo, y todo el mundo se entrega”, apunta Ca.

El capitán considera que otro de los motivos del éxito del equipo es el respaldo que tiene en las altas esferas. “Notamos muchísimo el apoyo de todos en el país, incluido el presidente . Nos reunimos con él tres veces en mayo y en junio”.

“Este interés por el fútbol es algo bastante nuevo. Antes no era una de las prioridades en Guinea-Bissáu, pero creo que el gobierno se ha dado cuenta de lo mucho que puede ayudar al país”.

Y no cabe duda de que hacer un buen papel en Gabón podría reforzar todavía más la moral nacional. Ca asegura que a los jugadores no les da miedo enfrentarse a los mejores de África. “Disputar la Copa de Naciones será todo un placer. Vencer a adversarios como Zambia nos ha demostrado que no debemos sentirnos inferiores. Si podemos derrotar al equipo que ganó la Copa de Naciones hace un par de años, ¿por qué iba a preocuparnos jugar el torneo?”.