lunes 21 marzo 2016, 06:59

Nkono: "Buffon es el emblema de una generación"

A sus 38 años, Gianluigi Buffon ha escrito una nueva página de su leyenda al batir el récord de imbatibilidad de un guardameta en la Serie A. Este domingo 20 de marzo, cuando se indicó el saque inicial del clásico frente al Torino, que el Juventus ganaría 1-4, el campeón del mundo de 2006 únicamente necesitaba tres minutos de tranquilidad para igualar los 929 que pasó Sebastiano Rossi sin ver perforada su meta en los años 90. El portero de los Bianconeri acabó subiendo el listón hasta los 974, antes del penal transformado por Andrea Belotti.

Como recordamos hace poco, detrás de una leyenda suele haber otra, y es posible que Italia nunca hubiese visto a Buffon protagonizar una carrera semejante, con cinco participaciones en la Copa Mundial de la FIFA™ —algo que únicamente han logrado tres jugadores en la historia— de no haber sido por el camerunés Thomas Nkono, cuyas actuaciones en Italia 1990 despertaron su vocación de joven.

En declaraciones a FIFA.com, el mítico portero de los Leones Indomables, que entrena hoy día a los guardametas del Espanyol de Barcelona, confiesa su orgullo por haber servido de inspiración a un fenómeno semejante.

Thomas Nkono, ¿qué se siente al ser el ídolo de un guardameta como él? Para mí es un honor haber sido la inspiración de un jugador que ha dado tantas alegrías a los aficionados al fútbol, y haber influido en su carrera. También siento un gran orgullo por haber señalado el camino a muchos arqueros africanos, por haber demostrado que era posible triunfar al más alto nivel.

¿Usted tenía algún ídolo de niño? ¿Quién era su propio Thomas Nkono? Bueno, ídolos no tenía, en realidad. Había oído hablar por la radio de jugadores legendarios como Lev Yashin, Ricardo Zamora… o de otros guardametas más recientes. Pero en Camerún no había la posibilidad de tener imágenes. Por lo tanto, lo que trabajaba era sobre todo mi imaginación. Aprendí a jugar en la calle, y quien me impartió mis primeras verdaderas sesiones de entrenamiento fue Vladimir Beara, ex portero de Yugoslavia, cuando llegó para dirigir a la selección camerunesa. Yo tenía talento, pero era la primera vez que realizaba un auténtico trabajo específico para mi puesto.

¿Puede contarnos cómo fue su primer encuentro con Buffon? Tuve la suerte de coincidir con él varias veces. La primera fue en Italia, cuando él estaba empezando su carrera, en el Parma. Creo que le sorprendió verme. En aquella época, yo no era consciente de lo que representaba para él. Volví a verlo en el Mundial de 1998, al que fui como entrenador de porteros de mi país. Aproveché para invitarlo a mi homenaje, en Camerún. Fue la primera vez que viajó a África. Desde entonces, nos hemos mantenido en contacto, e intercambiamos mensajes en las grandes ocasiones. Le puso a su hijo el nombre de Thomas en mi honor. Esa decisión me sorprendió, ¡pero me llegó al corazón!

¿Qué puede decirnos del estilo de Buffon? En mi opinión, simboliza perfectamente la evolución del puesto después del cambio del reglamento que prohibía atrapar con la mano los pases hacia atrás. Es uno de los que destacan en la comprensión del juego, algo necesario cuando se tiene una defensa adelantada. Es el emblema de una generación que ha hecho progresar este puesto. Buffon siempre ha sido un guardameta tranquilo, no necesariamente muy espectacular, pero tremendamente eficaz. Y sobre todo ahora, con la experiencia, es mucho más sobrio y eficaz en todo lo que hace. No hay ningún gran equipo sin un gran arquero. Él siempre ha sabido hacer frente a la presión en grandes equipos, que aspiraban a ganar. Creo que es normal que haya llegado adonde está hoy. Los guardametas tienen la mala suerte de que la gente siempre se fija más en quienes marcan goles, pero yo pienso que Buffon está entre los mejores futbolistas del mundo, ocupa un lugar entre los mayores guardametas de la historia.

¿Usted se ve reflejado en él a veces? Puede que en la tranquilidad, en esa capacidad de relativizar las cosas. Pero es lo único que veo. Yo era mucho más ágil y saltarín.

**¿Qué le gustaría decirle ahora?

**Que se divierta, simplemente, porque a veces, cuando estamos cerca del final, no nos damos muy bien cuenta de la suerte que tenemos. Llegará a su debido tiempo, pero mientras tanto debe disfrutar al máximo de esta carrera tan gloriosa. Después quizás encuentre ese amor por transmitir sus conocimientos a las jóvenes generaciones, como yo he tenido la suerte de hacer, al pasar a ser entrenador. No sé qué vocación tiene respecto a eso, pero nunca se puede saber con antelación. Tengo bastantes amigos que no se veían haciéndolo, y que luego se convirtieron en grandes entrenadores.