viernes 30 diciembre 2016, 09:08

Barthez: "Zidane sabe de fútbol"

p.p1 {margin: 0.0px 0.0px 0.0px 0.0px; font: 19.0px Helvetica} p.p2 {margin: 0.0px 0.0px 0.0px 0.0px; font: 19.0px Helvetica; min-height: 23.0px}

Burdeos, 17 de agosto de 1994. Francia perdía 0-2 ante la República Checa en un choque amistoso. En el banco de reservas estaban Fabien Barthez, que únicamente había sido internacional una vez, y Zinédine Zidane, que se disponía a reemplazar a Corentin Martins en el minuto 63, y a dar un vuelco al encuentro. “Era su primer partido con la selección. Entró y se echó el equipo a cuestas de inmediato. Se hizo con la batuta”, cuenta el Calvo Divino a FIFA.com. Y marcó dos goles sensacionales: un zurdazo con el exterior a 25 metros de la meta rival y otro de un remate de cabeza que se coló por toda la escuadra.

Barthez se quedó asombrado, como todo el mundo. Y volvería a asombrarse en numerosas ocasiones, hasta 2006, cuando ambos compañeros de viaje colgaron juntos las botas. Actualmente, en cambio, al antiguo arquero de los Bleus no le sorprende demasiado ver a su amigo triunfar como técnico del Real Madrid y figurar entre los tres finalistas del Premio The Best al entrenador de la FIFA 2016 de fútbol masculino. “Todos hablan de éxito, pero yo no lo veo de ese modo”, afirma el campeón del mundo. “No es un éxito en el sentido de que le haya caído del cielo. Hay que buscar las oportunidades, y cuando aparecen hay que saber aprovecharlas. Como Cruyff, Maradona, Pelé… Zidane siempre ha sabido marcar diferencias en las grandes citas”.

“Zidane sabe de fútbol”, recalca. “Le gusta el juego ofensivo. No hay que olvidar que el fútbol, ante todo, es diversión y juego. Alguna gente tiende a olvidarlo a veces, pero Zidane no. Yo lo escucho hablar y veo cómo trabaja. Veo que se apoya en esa noción de diversión y de esfuerzo”. Y con éxito, ya que en menos de un año Zizou ha dado al equipo merengue una Liga de Campeones y una Supercopa de la UEFA, además de una Copa Mundial de Clubes de la FIFA.

Una evolución natural En opinión de Barthez, el exmediapunta ha evolucionado de forma natural hacia el oficio de entrenador. “Zidane tiene las cualidades de un deportista de alto nivel, es decir, saber escuchar y observar”, analiza. “Es lo que hizo durante toda su carrera para convertirse en un gran futbolista, y es lo que ha hecho para llegar adonde está hoy en día. Nunca fue pregonando que iba a ser entrenador del Real Madrid. Eso no sería propio de él. Que Didier Deschamps se convirtiese en entrenador era algo mucho más claro, por su faceta de líder, de alguien que tomaba mucho la palabra. Zidane era un líder, ante todo, dentro del terreno de juego. De vez en cuando decía algo, pero sobre todo se echaba el equipo a cuestas con el balón en los pies, aunque con el tiempo fuese expresándose más, convirtiéndose en un peso pesado del plantel”.

Zizou fue nombrado entrenador del primer equipo madridista en enero de 2016, y supo calmar a un vestuario en crisis y hacer que reaccionase. “Se le respeta porque ha sido un gran futbolista, pero sobre todo porque es una buena persona, sana y sincera. Siempre dirá la verdad, aunque duela. Y eso es importante para tener la confianza de sus jugadores”, insiste Barthez. “No lo digo porque sea mi amigo. Objetivamente, ha sabido unir y aportar, ahí ha radicado siempre su éxito. Jugar para divertirse es el camino que conduce a la victoria”.

Santos, favorito Pero dirigir a uno de los mejores equipos del mundo no es todo diversión y victorias. También supone exponerse a las críticas y a la eventualidad de ver cómo un cómodo banquillo se transforma de repente en un asiento eyectable si los resultados no acompañan. Por muy Zidane que se llame uno. “Lo que le hizo tomar esa decisión fue la simple pasión por el fútbol”, explica Barthez, quien ha optado a su vez por dar el salto al automovilismo. “El resto no le importa. Ni la presión de la prensa, ni el dinero… estoy convencido de que todo eso es secundario para él, y que ni siquiera piensa en ello. No lo hace por obtener reconocimiento, sino por diversión y por amor hacia el fútbol. Y también tiene ganas de transmitir lo que sabe, que es un factor importante para él”.

Oyendo a Barthez, sin duda a Zidane tampoco le preocupan las distinciones personales. Por tanto, no le parecerá mal que su amigo no lo considere favorito al Premio The Best al entrenador de la FIFA 2016 de fútbol masculino, galardón por el que compite con Claudio Ranieri y Fernando Santos. “Que esté ahí ya es algo magnífico”, apunta el exarquero, para quien el seleccionador portugués es el mejor situado de esta pugna. “Creo que ganar una Eurocopa es más difícil que ganar la Liga de Campeones”, dice el campeón de Europa de selecciones de 2000. “El nivel es más alto, y únicamente se celebra una vez cada cuatro años. El triunfo de Portugal fue ampliamente merecido, porque jugó en equipo. El mérito es de los jugadores dentro de la cancha, y también del entrenador, que los condujo a ese resultado”.

Con todo, el próximo 9 de enero, en Zúrich, más de 22 años después de aquella noche bordelesa, Zidane podría asombrar de nuevo a Barthez.