miércoles 25 septiembre 2019, 08:58

Klopp: "Soy quien soy gracias a mis jugadores y a mi familia"

  • Fue distinguido con el The Best al Entrenador de Fútbol Masculino de la FIFA

  • Ganó la Liga de Campeones de la UEFA con el Liverpool

  • "Les tengo muchísimo respeto a Guardiola y Pochettino"

A Juergen Klopp le costaba contener la emoción. El entrenador del Liverpool acababa de poner el colofón a un 2019 espectacular con el premio The Best al Entrenador de Fútbol Masculino de la FIFA, y en su sonrisa se apreciaba además un orgullo inmenso.

Para el técnico alemán, las emociones y el análisis siempre han ido de la mano, y con ese humor tan distendido dialogó con FIFA.com acerca de su gran año.

Sr Klopp, ¿cómo se siente al haber sido elegido el mejor entrenador de fútbol masculino de 2019?

No esperaba sentirme tan bien, pero estoy encantado de estar aquí y muy orgulloso de haber ganado este premio. Es un gran día para mí.

Dijo que prefería el reconocimiento colectivo al individual. En este sentido, ¿quiere compartir el premio con sus jugadores?

Por supuesto, completamente. En el fútbol, soy quien soy gracias a mis jugadores, pero, a nivel personal, soy quien soy gracias a mi familia, y también les estoy muy agradecido. Lo son todo para mí.

Les ha ganado la partida a dos excelentes entrenadores. ¿Qué opinión le merecen?

Les tengo muchísimo respeto. Lo que hizo Pochettino el año pasado fue excepcional. Muchas veces, cuando no ganas un título, la gente no se acuerda de ti, pero lo suyo fue formidable. Ha ido construyendo su equipo poco a poco, manteniendo siempre la cohesión. ¿Y qué decir de Pep Guardiola? Por todos los títulos que ha ganado, por cómo juegan sus equipos… Es un fuera de serie. Sin duda, es el mejor entrenador al que me he enfrentado en los banquillos. Ha sido un honor estar nominado junto con ellos dos.

Los tres entrenan en la Premier League. ¿Marca esto una tendencia para los próximos años en el fútbol?

Bueno, yo no diría tanto. La Premier League recibe una gran influencia de distintos entrenadores, pero no se refleja siempre en los resultados, porque es imposible. Eso sí, a largo plazo, sí hemos ejercido nuestra influencia. No creo que se marque una tendencia, porque el fútbol es muy cambiante, pero lo cierto es que hay muchos equipos buenos en la Premier League que pelean por algo. No es que hayamos empequeñecido a España o Alemania; es más bien que hay seis o siete equipos candidatos al título, lo que la hace muy especial. Y esos equipos, lógicamente, cuentan con grandísimos entrenadores.

¿Con qué momento se queda del 2019?

Con el triunfo sobre el FC Barcelona. Fue un momento increíble. Muchos expertos no habrían apostado nada por nosotros, y yo seguramente tampoco. Porque perder 3-0 contra un equipo que tiene a [Lionel] Messi, [Luis] Suárez y a tantos otros jugadores en sus filas es poco menos que firmar tu sentencia de muerte. No creíamos que fuéramos a ganar, pero sabíamos que había una posibilidad y creímos en ella. Fue grandioso. El apoyo que tuvimos en las gradas... Echando la vista atrás, podríamos decir que ganamos la Liga de Campeones en ese partido. Es algo que ninguno de nosotros olvidará jamás.

¿Qué les dijo a sus jugadores antes del encuentro?

Muchas cosas, pero la clave llegó al final. “Yo creo que no se puede. Pero, como sois vosotros, seguro que tenemos alguna posibilidad”, les dije. Eso era exactamente lo que pensaba, la sensación que tenía. Y, desde el minuto uno, pasamos literalmente por encima del Barcelona. Entonces, pensé: “Al menos estamos preparados”. Y es muy difícil aguantar en momentos así contra un equipo como el nuestro y en un ambiente como el que había en el estadio.

Cuentan que, a la mañana siguiente de ganar la Bundesliga con el Borussia Dortmund, se despertó completamente solo en el autobús en el que desfilaron. ¿Le pasó algo parecido esta vez?

¡Es verdad! Fue después de la celebración. Pero, aquella mañana, cuando me desperté sin saber muy bien lo que había pasado, decidí que nunca más me volvería a pasar algo así. Soy un maniático del control y no me gusta emborracharme. Esta vez, estaba completamente sobrio, por lo que recuerdo cada segundo del desfile de celebración. Creo que incluso sería capaz de reconocer a las personas que vi desde el autobús si volviera a verlas. Fue tan intenso… Sencillamente increíble.