La evolución del 'Método Simeone'
Ganó con el Atleti la Europa League tras tres años sin títulos
Tercera nominación consecutiva al The Best
Su última obra: protagonismo a los jóvenes y retener a estrellas
"Si se cree y se trabaja, se puede". Esa la frase más ilustre de Diego Pablo Simeone como entrenador del Atlético de Madrid.
El argentino, nominado por tercera edición consecutiva al Premio The Best al entrenador de fútbol masculino, la empleó ante la hinchada rojiblanca en los festejos por La Liga 2014, un título que puso fin a una década de triunfos mano a mano entre Barcelona y Real Madrid.
Aquel no era el primer trofeo del Cholo en rojo y blanco, y sin embargo marcó un antes y un después. El equipo del coraje y corazón pasó a ser un rival directo en cada competición. Y continúa...
A pesar de no levantar ningún trofeo entre 2015 y 2017, Simeone aprovechó ese periodo para añadir nuevas fórmulas a su exitoso libreto y relanzar un proyecto del que muchos jugadores quieren formar parte y que cuenta actualmente con tres campeones del mundo en Rusia 2018.
¿Sabías que…
durante la temporada 2017/2018, su Atlético ha sido el equipo menos goleado (22) de las cinco grandes ligas europeas
es el técnico con más títulos (7) en la historia del club (ndlr: la Supercopa de Europa, cosechada el pasado 15 de agosto, está fuera del periodo que distingue a cada entrenador nominado)
es el preparador que más temporadas consecutivas (8) ha dirigido al Atleti en Primera División
es el segundo entrenador, por detrás del francés Stéphane Moulin (Angers SCO, julio 2011), que más tiempo lleva al frente de un equipo de la élite europea
Hace solo unos meses amplió su contrato con los Colchoneros hasta junio de 2020
Detector de talento
Con una idiosincrasia de sobra conocida, Diego Simeone ha sabido agregar valor añadido a un estilo. Si los veteranos marcaban el paso en su etapa inicial, son ahora varios jóvenes de la casa como Saúl, Thomas o Lucas Hernández los que han recibido los galones luego de un exigente periodo de maduración.
“Simeone me ha cambiado la vida. No tengo duda de que soy el jugador que soy gracias a él”, decía Lucas al Diario Olé minutos después de proclamarse campeón del mundo con Francia en Moscú. Una alusión tan directa como significativa de uno de los jugadores revelación de la última Copa Mundial de la FIFA™.
Y no es la única referencia personal entre los noveles llamados a gobernar este renovado Atlético. “Le estaré agradecido de por vida. Me hizo debutar y tiene la sinceridad que pocos tienen”, comentaba hace unos meses el también mundialista Saúl Ñíguez, pieza consolidada en el esquema del argentino.
Simeone dando indicaciones a Saúl, jugador del club rojiblanco desde los 13 años.
Unos vuelven, otros se quedan
No solo de sentimiento y una apuesta por los jóvenes vive un proyecto duradero. La guinda son sus estrellas. Y sus emblemas. "He tenido la oportunidad de volver al Atleti que siempre soñé", decía Fernando Torres al despedirse definitivamente del club en mayo. Quiso regresar, y Simeone le reclutó para mejorar un ataque mermado tras la salida de Diego Costa al Chesea.
El propio ariete hispanobrasileño manifestó su deseo de volver poco después de su marcha. "Si me voy es solo para ir al Atleti", avisó desde Londres. El reencuentro finalmente se hizo realidad, y los goles de Costa fueron diferenciales en los últimos triunfos continentales del equipo madrileño.
Pero si hay un elemento que explica el giro de este Atleti es la simbiosis Diego Simeone - Antoine Griezmann. El campeón mundial fichó en 2014 alejado del foco mediático. Hoy el nivel de Grizi no se entendería sin la influencia del argentino. "El Cholo me ha llevado al top-3 del mundo y le debo mucho", dijo antes de viajar al Mundial.
Una influencia que ayudó al '7' a rechazar una oferta del Barça para seguir de rojiblanco. Y una capacidad para retener a las estrellas que mantiene más vivo que nunca el trabajo de Simeone.