Joe Montemurro está acostumbrándose a generar éxitos instantáneos. La pasada temporada, el australiano regresó al Arsenal y se aupó a lo más alto de la tabla de liga en su primera campaña completa con las Gunners. El triunfo en la Superliga Femenina de Inglaterra resultó más espectacular si cabe pues puso fin a los siete dolorosos años de sequía que registraba uno de los clubes femeninos más laureados del país.

La temporada 2018/19 del Arsenal marcó el espectacular regreso a la gloria de las londinenses. Las Gunners se convirtieron en el primer equipo de la Superliga Femenina de Inglaterra que ganaba nueve partidos consecutivos, alcanzaba la final de la Copa de la Liga Femenina y se clasificaba para la Liga de Campeones Femenina de la UEFA tras cinco años de ausencia.

Reflexivo, mesurado, discreto y humilde, Montemurro creyó que estaban gastándole una broma cuando una exjugadora le comentó que acababan de incluirlo en la lista de los diez nominados al Premio The Best al Entrenador de Fútbol Femenino de la FIFA. Además, el australiano es uno de los únicos tres técnicos de clubes nombrado en esta categoría de los The Best FIFA Football Awards™ que el 23 de septiembre se entregarán en Milán.

Montemurro pasó más de una década formándose como entrenador en las categorías juveniles y semiprofesionales del Melbourne, e incluso trabajó brevemente en Papúa Nueva Guinea. La primera oportunidad de entrenar en un equipo absoluto se hizo esperar, pero cuando Montemurro la recibió, se aferró a ella con ambas manos.

La principal característica que está definiendo su carrera es el impacto inmediato que su llegada tiene en sus equipos. En la temporada de su debut llevó al modesto Melbourne Victory a proclamarse subcampeón de liga, la mejor posición en la tabla de clasificación de la historia del club, que además no se ha vuelto a repetir.

Pero lo mejor estaba por llegar. Su primera campaña de liga completa en el Melbourne City culminó con un éxito que difícilmente se podrá igualar en la W-League de Australia. Montemurro consiguió el título para club sin haber dejado escapar ni un solo punto en los 12 partidos que componen la temporada regular y, a continuación, en la serie final, conquistó el campeonato de 2015 con la misma contundencia.

¿Cuál ha sido en definitiva el secreto de su éxito con el Arsenal, su actual equipo? “Uno de los aspectos más importantes ha sido tenerlo todo claro desde el primer momento”, ha explicado Montemurro a FIFA.com. “Tener claro quiénes éramos, quiénes queríamos ser y las tres o cuatro cosas que harían posible que todo encajara”.

“Luego, también el planteamiento sostenible de nuestro proceso de fichajes. No se trataba necesariamente de fichajes que nos garantizaran la conquista inmediata del trofeo, sino de fichajes de jugadoras de diversas edades, que nos permitieran planificaciones a largo plazo”.

Aunque parezca un tópico, Montemurro se declara seguidor del Arsenal desde que era niño. La emoción y el puro gozo del histórico gol de la victoria de Alan Sunderland en la final de la FA Cup de 1979 impactó con fuerza al niño de nueve años que aquella fría noche de invierno en Melbourne seguía el partido a un mundo de distancia.

Ahora, a sus 40 años, el australiano ha cerrado el círculo de la forma más increíble.

“Los planteamientos que tenemos el Arsenal y yo se complementan sobre todo en lo tocante a la forma en la que queremos jugar”, comenta Montemurro. “Tener un estilo de juego que se ajuste a la manera del Arsenal resultaba importantísimo”.

“Queremos jugar al fútbol como se tiene que jugar: desplegar un fútbol ofensivo, mantener la posesión y tratar de entusiasmar. Todo esto engloba la forma en la que quiero plantear mi juego. El Arsenal siempre será un equipo con tendencia a un fútbol atractivo que guste al espectador”.

“No solo aprendo con el fútbol, sino también con las personas de todas las profesiones y procedencias que hacen cosas fascinantes. En el fútbol contamos con un vehículo maravilloso para educar y convertirnos en mejores personas, y a mí esto me inspira”.