martes 07 agosto 2018, 22:37

Las 7 claves de Deschamps

  • Levantó el trofeo de campeón mundial como capitán en 1998

  • Guió a Les Bleus al título en Rusia 2018

  • Es candidato a  The Best al Entrenador de la FIFA en Fútbol Masculino 2018

El siete se considera un número de propiedades singulares. Entre otras, es sinónimo de buena fortuna. Y no es extraño escucharlo asociado a Didier Deschamps, puesto que se la ha aportado a lo largo de su carrera.

Para poder tener el mejor palmarés del fútbol francés es indudable que se necesita una pizca de suerte, pero sobre todo trabajo —muchísimo— y talento.

Tras conquistar la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™ con la selección francesa, quien fuera el número 7 de los Bleus figura, como era de esperar, en la lista de candidatos al Premio The Best al entrenador de la FIFA de fútbol masculino.

Deschamps se convirtió en el tercer hombre de la historia que conquista el trofeo mundialista primero como jugador y luego como entrenador, siguiendo los pasos del brasileño Mário Zagallo y el alemán Franz Beckenbauer.

“Fueron dos grandísimos jugadores. Yo no era tan bueno como ellos dentro de la cancha, aunque me las arreglaba”, dijo sonriendo ante los medios justo después del segundo título mundialista.

Pero el hecho de “arreglárselas” no tuvo nada que ver con la suerte. FIFA.com lo analiza en siete puntos.

1. Un entrenador-jugador

No sorprendió a nadie que DD decidiese ser entrenador, y menos aún a sus compañeros, quienes supieron desde un primer momento que se encontraban ante un líder. Con apenas 19 años, ya lucía el brazalete de capitán del FC Nantes, una constante a lo largo de sus 16 temporadas de carrera, en sus distintos clubes y en la selección. Sus técnicos siempre apostaron por él como canal de comunicación con el resto del equipo dentro del terreno de juego.

2. Aimé Jacquet como modelo

Deschamps se empapó de los conocimientos de todos los entrenadores que tuvo, especialmente del que le permitió alzar el Mundial en 1998. “Con nosotros consiguió un milagro. Para mí es Dios. Siento un enorme respeto por él, en el aspecto humano. Cambió nuestras vidas. Fue un ejemplo para mí”, declaró tras el título de 2018. Ese respeto es mutuo, ya que el exseleccionador siempre lo ha considerado su heredero.

3. Los títulos con sus clubes

Deschamps colgó las botas con un palmarés fabuloso, pero su hambre de logros no estaba en absoluto saciada. Tras alcanzar la final de la Liga de Campeones de la UEFA con el Mónaco en 2003 y devolver de manera fulgurante al Juventus a la élite en 2006, hizo que el Marsella conquistase la liga francesa en 2010, tras 18 años sin conseguirlo.

4. Triunfar como internacional

En cuanto a los Bleus, los condujo a los cuartos de final de Brasil 2014, antes de alcanzar la final de la UEFA EURO 2016 y subir luego a la cima del mundo en 2018, con un balance de 53 victorias en 83 partidos desde 2012 (más 15 empates y 15 derrotas).

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5. Detestar la derrota

"Odio perder. Es inconcebible para mí peder y tener una sonrisa en la cara. Siempre me irritaba ver compañeros que no reaccionaban como yo y por eso a menudo prefería aislarme después de una derrota, de lo contrario hubiera dicho cosas de las que me arrepentiría", decía Deschamps a BeIN.

6. Aprender de los fracasos

Deschamps ha sufrido también varios reveses amargos, aunque ha sabido extraer lecciones de todos ellos. Cinco años después del trauma de los clasificatorios de EEUU 1994, fue el primer francés que alzaba la Copa Mundial de la FIFA.

Veinte años más tarde, demostró de nuevo su capacidad de recuperación, tras dejar escapar en 2016 el título continental ante su público. Después de ser campeón en Rusia, confesaba sobre aquella derrota:

Antes de perder el partido contra Portugal, sacralicé ese acontecimiento, inclinándome por el aspecto emocional. Entonces corregí el tiro. Fui a lo simple.
Didier Deschamps

7. Mirar hacia el futuro…

Deschamps siempre se ha negado a presumir de su glorioso pasado ante sus jugadores. “El año 1998 es pasado, ¡y yo no vivo en el pasado! Mis jugadores tienen que escribir su propia historia”, dijo a FIFA.com durante Rusia 2018.

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