lunes 09 septiembre 2019, 15:06

El golpe en la mesa de las Leonas de Phil Neville en Francia

  • Phil Neville aspira al Premio The Best al Entrenador de Fútbol Femenino

  • Su selección inglesa terminó cuarta en Francia 2019

  • Analizamos el triunfo de las Leonas sobre Noruega en cuartos

Aunque su desempeño no fuese totalmente convincente, Inglaterra cumplió en el Grupo D de la Copa Mundial Femenina de la FIFA Francia 2019™. Al 2-1 inicial logrado ante, Escocia, su acérrimo rival, le siguieron sendas victorias ajustadas sobre una correosa Argentina y un Japón lejos de su nivel de antaño. A continuación llegó un contundente triunfo contra Camerún en octavos de final, resultado que deparaba a las inglesas un choque ante Noruega en cuartos.

¿Era de verdad el combinado inglés uno de los favoritos al título, como seguía insistiendo su seleccionador, Phil Neville? Con su victoria por 3-0, las Leonas dieron un golpe de autoridad en Le Havre. Analizamos el partido.

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El esquema táctico

Antes de que Neville anunciase cuál sería su once titular, todo eran incertidumbres, especialmente en la línea defensiva. La capitana, Steph Houghton, estaba recuperándose de un problema en el tobillo, mientras que su compañera habitual en el eje, Millie Bright, se encontraba enferma. Al final ambas jugaron y Neville solo hizo un cambio respecto al duelo ante Camerún: Demi Stokes sustituyó a Alex Greenwood en el lateral izquierdo.

La inclusión de Stokes, de gran fortaleza física, indicaba que Neville quería apuntalar la defensa y frenar las internadas de la estrella noruega Caroline Graham Hansen. Con Stokes más replegada, Lucy Bronze podría subir más por la banda derecha.

Por lo demás, se mantuvo la formación táctica que tan útil estaba resultando a las Leonas en tierras francesas: un 4-2-3-1. Jill Scott y Keira Walsh eran las encargadas de asegurar el mediocampo, lo que permitía los intercambios de un trío de mediapuntas compuesto por: Fran Kirby (haciendo de 10), Nikita Parris (desde la derecha) y Toni Duggan (por la izquierda). Delante, en punta, la goleadora Ellen White.

El resultado

A pesar de formar como volante en el mediocampo, Jill Scott se internó hasta el área y marcó el 1-0 tras un centro de Lucy Bronze que Ellen White no acertó a rematar. El gol llegó a los dos minutos y siete segundos, y ayudó a las Leonas a dejar atrás los posibles nervios. Siguió además una pauta en Francia: Inglaterra había marcado en el primer el cuarto de hora en 3 de sus 4 choques anteriores.

La presión no se detuvo, y Scott continuó subiendo más de lo habitual. Era arriesgado y hacía que Inglaterra fuese vulnerable a los contraataques, pero al mismo tiempo desestabilizó a la defensa escandinava. White estrelló un disparo contra el poste y luego firmó el segundo a las puertas del descanso. El punto fuerte de Inglaterra era claramente su flanco derecho, con Bronze y Parris causando serios problemas a sus rivales.

Noruega empezó con más ímpetu tras la reanudación, pero Bronze, elegida Jugadora del Partido, frenó en seco todo intento de reacción con un auténtico golazo.

El segundo penal fallado por Parris en el torneo no tendría consecuencias. Inglaterra se limitó a conservar el resultado y Neville pudo dar minutos a Georgia Stanway y Rachel Daly, ya pensando en las semifinales.

La reacción

“Tengo el mejor trabajo que pueda haber. Por mucho que un entrenador sea el mejor del mundo, si no cuenta con los mejores futbolistas, con la disposición, la determinación y la capacidad de aprender y mejorar, no irá a ningún sitio como técnico. E imagino que por eso he estado tan seguro en los últimos 18 meses, optimista a veces, atrevido con las palabras que uso, porque trabajo día sí y día también con un grupo de jugadoras que son absolutamente asombrosas. Me asombran y me inspiran todos los días. El de hoy ha sido uno de los momentos de mayor orgullo que he tenido en el fútbol”.

Phil Neville tras el partido.