Pablo Moreno tiene reputación de ser un goleador consumado. Considerado un talento de gran proyección en España, el futbolista nacido en Granada dejó huella en la cantera del Barcelona al anotar más de 200 goles antes de recalar el verano pasado en la Juventus. El internacional español no ha dejado de cosechar éxitos en el club turinés, con el que necesitó menos de cinco minutos para ver puerta en su primer partido en la UEFA Youth League.

Sin embargo, no todo son goles para Moreno, uno de los jugadores más creativos de la pujante línea ofensiva de la Rojita en la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA Brasil 2019™, donde suma hasta la fecha más asistencias que dianas.

“Siempre trabajo para el equipo”, cuenta Moreno a FIFA.com. “Lo único que quiero es hacer lo mejor para el colectivo en cada momento, ya se trate de goles, asistencias o lo que sea. Lo que haga falta por el equipo”, añade.

Su último pase mortal derivó en el primer gol de España ante Senegal, partido de octavos que se saldó con victoria de los europeos por 2-1. Con su capacidad para atraer la atención de los rivales gracias la inteligencia de sus movimientos, Moreno ha generado numerosas oportunidades para sus compañeros de ataque en lo que llevamos de Mundial.

“Jugamos un fútbol atractivo. Todo el mundo sabe manejar la pelota y tenemos verticalidad. Siempre decimos que somos un verdadero equipo, una familia, y eso es lo que nos hace ganar partidos”, añade.

Más de un año después de cambiar el fútbol español por el italiano, Moreno sigue dando pasos hacia el debut en el primer equipo. De hecho, ante la ausencia de Cristiano Ronaldo, el ariete español entró en la convocatoria de la Juventus para el partido frente al Génova a finales de la temporada pasada, pero no llegó a tener minutos.

“El fútbol italiano es más físico, mientras que en España se prefiere un juego más de toque y combinaciones. En cualquier caso, me voy acostumbrando y cada vez me siento más cómodo con el estilo italiano”.

Moreno no es el único jugador de la Juve presente en Brasil estos días. Dos de sus compañeros, el italiano Franco Tongya y el paraguayo Santiago Ocampos, han alcanzado también los cuartos de final después de que sus equipos midiesen fuerzas en la fase de grupos con victoria para el cuadro sudamericano.

“Hablé con los dos después de ese partido y no hay que preocuparse, porque entre ellos está todo bien”, asegura Moreno con una sonrisa. “Claro que hablamos mientras estamos aquí, porque somos amigos y tenemos una buena relación”.

Moreno todavía podría enfrentarse a sus amigos, pero su equipo tendrá antes que vérselas con Francia, que viene de golear a Australia por 4-0 en octavos. El duelo entre españoles y franceses es probablemente el que más expectación ha generado en lo que va de certamen. La Rojita, que suma cuatro subcampeonatos en la historia del torneo, el último en 2017, busca superar al combinado galo para seguir aspirando al sueño de conquistar por fin el cetro mundialista.

“La verdad es que estamos haciendo un gran fútbol. Somos un equipo conjuntado y solidario. Si seguimos así podemos volver a meternos en la final y llevarnos el gato al agua esta vez”, concluye.