Argentina depende de sí misma para seguir en la Copa Mundial Femenina de la FIFA Francia 2019: si gana, estará en los octavos de final.

Si alguien le hubiera dicho a jugadoras y cuerpo técnico que este sería el panorama antes del partido con Escocia, todos habrían esbozado una sonrisa.

Está claro que el duelo es durísimo: en el plantel sobran palabras de elogios para el rival, al que han estudiado tanto o más que a Japón e Inglaterra.

Si bien Argentina no ganó todavía en un Mundial, y acumula 210 minutos sin marcar, cuenta con razones válidas para creer en la clasificación. Las analizamos aquí.

Tiene con qué defenderse

Mantener el arco en cero es crucial para un equipo al que le cuesta generar ataques claros. En función de ese objetivo, vale dividir este punto en dos…

Por un lado, Vanina Correa atraviesa un presente extraordinario, tras ser figura en los dos primeros partidos.

“Lo dijo el técnico inglés, es una arquera de clase mundial. Está a la altura del torneo y su experiencia es clave para nosotras”, dice Florencia Bonsegundo a FIFA.

Por el otro, demostró que puede ser un bloque sólido a la hora de defender. Es cierto que Inglaterra le generó más peligro que Japón, pero también que la escocesas tienen menos individualidades que las inglesas.

“Para defender bien son claves el orden y la comunicación. En ambas, crecimos a lo largo del torneo”, avisa.

Puede sorprender en ataque

Para ganar hay que marcar goles. Y para marcar goles, hay que atacar. Hasta aquí, ese ha sido un déficit de Argentina, pero… ¿y qué tal si sorprende al hacerlo?

Recuerden, hasta acá jugó ante el segundo y tercero del último Mundial, y tomó los recursos que creyó necesarios para darse esta oportunidad.

Ahora, tendrá una mayor vocación ofensiva ante un rival también necesitado de ganar. Y eso significa que dejará espacios atrás…

“Creo que las podemos lastimar siendo verticales y saliendo rápido de contra”, opina Florencia.

“Tenemos jugadoras ofensivamente importantes, veloces, con las que nos conocemos bien. Ojalá logremos ser punzantes y que llegue el primer gol de una vez por todas”.

El momento es hoy

Independientemente de lo que suceda, la actuación de estas muchachas ya es histórica.

Bonse lo resume en dos palabras. “Orgullo y cambio. Orgullo, porque hemos dejado a Argentina bien parada, y si bien no terminó el Mundial, esa imagen significa mucho”.

“Y cambio, porque iniciamos la verdadera transformación que necesita Argentina para el fútbol femenino. Con el material que hay, se pueden hacer muchas cosas”.

Aún así, nadie mejor que estas futbolistas saben lo difícil fue clasificarse al Mundial, ni el desgaste que hicieron para darse la chance de estar entre las mejores 16.

Así, sin importar qué edad tenga cada una o qué le depare el futuro, el miércoles es el día para echar el resto. Garra y corazón no les va a faltar, asegura Bonsegundo.

“Es el 200% de este equipo, algo que nos identifica, y que no sé si tienen otros países… Igual, en este último partido, tenemos que dedicarnos a jugar finalmente”.