lunes 12 abril 2021, 05:23

Las estrellas emergentes que esperan brillar ante su afición

  • En los últimos años, Australia y Nueva Zelanda apenas han hecho cambios

  • Varias caras nuevas han sobresalido en la última temporada de la W-League

  • Analizamos a jugadoras que esperan disputar el Mundial Femenino ante su público

Australia y Nueva Zelanda se preparan para acoger la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™ y, como siempre, buena parte del interés se centrará en las anfitrionas.

Ambos países han presentado unos onces muy reconocibles en los últimos años. De hecho, Nueva Zelanda viajó a Francia 2019 con 17 futbolistas que ya habían disputado la prueba reina cuatro años antes, mientras que en el combinado australiano repitieron 14 jugadoras. Tom Sermanni y Tony Gustavsson, sus respectivos seleccionadores, saben que tendrán que ampliar sus planteles a lo largo de los dos próximos años. A corto plazo, ambos afrontan el Torneo Olímpico de Fútbol Femenino.

La última temporada de la W-League australiana, que vivió ayer su vibrante desenlace, ha puesto de relieve que las dos selecciones cuentan con varias estrellas emergentes. Después del éxodo masivo de futbolistas australianas a Europa en los últimos 18 meses, el campeonato nacional ofreció un buen escaparate para que varios rostros nuevos se dieran a conocer, una oportunidad que algunas jugadoras han aprovechado al máximo.

FIFA.com destaca algunas de las futbolistas cuyas opciones de participar en la Copa Mundial de 2023 han aumentado en los últimos meses.

Kyra Cooney-Cross (AUS)

“Creo que es el mayor talento del fútbol en Australia. Puede llegar hasta donde quiera”. Estas palabras tan entusiastas son de Jeff Hopkins, el entrenador más laureado de la W-League. Con 19 años recién cumplidos, Cooney-Cross ya se ha convertido en un pilar del Melbourne Victory y una estrella consagrada del campeonato australiano.

Criada en la Victoria rural, Cooney-Cross fue una de las futbolistas que la selección australiana dejó en la recámara para Francia 2019. Debutó en liga con apenas 15 años, por lo que ya posee una experiencia significativa. La joven, una centrocampista ofensiva y creativa, fue decisiva en el triunfo liguero del Melbourne Victory este domingo.

Olivia Chance (NZL)

Si bien no es una cara nueva —estuvo en Francia 2019—, lo cierto es que en los últimos meses se ha constatado por qué Olivia Chance tiene muchas opciones de ser una fija en la selección neozelandesa en los próximos años. Chance, una centrocampista todoterreno, brilló en el Brisbane Roar y demostró su buena compenetración con la australiana Tameka Yallop. Pocas futbolistas generaron más ocasiones de gol en la liga que Chance, quien también hizo gala de su capacidad para marcar goles espectaculares en más de una ocasión.

Clare Wheeler (AUS)

Clare Wheeler, una centrocampista defensiva que ha pasado varios años sin llamar la atención en el Newcastle Jets, es el mejor ejemplo de la jugadora que ha aprovechado al máximo las oportunidades que ha generado la marcha de algunas grandes figuras. Reconvertida en atacante en el Sydney FC, Wheeler ha sumado la creatividad a su reputación de futbolista trabajadora, y su entrenador opina que la llamada de la selección está más cerca que nunca.

“Es una superestrella. Debería ser una Matilda ya mismo, no en el futuro. Me sorprendería que no entrara en la próxima convocatoria”, afirma Ante Juric, técnico del Sydney FC.

Claudia Bunge (NZL)

“Ha empezado a madurar como futbolista. Sus actuaciones son mejores, su desarrollo es mejor, y espero que continúe”, dijo Tom Sermanni, el seleccionador de Nueva Zelanda, cuando convocó por primera vez a Claudia Bunge hace 18 meses. Y seguro que el preparador de las neozelandesas está encantado con los progresos que ha hecho la central en su primera temporada completa en categoría absoluta.

Después de tener un papel relevante en el camino del Melbourne Victory hasta el título, Bunge se ha postulado de la noche a la mañana como sucesora a largo plazo de Abby Erceg, el incombustible baluarte defensivo de la selección.

Jada Whyman (AUS)

Whyman está considerada una promesa sobresaliente desde que se convirtió en la segunda arquera más joven en debutar en la W-League con apenas 16 años. A los 18, Whyman ya había recibido la llamada de la selección, y el domingo fue nombrada la mejor jugadora de la gran final. Al igual que Lydia Williams, la guardameta titular de Australia, Whyman también es aborigen y, como su ídolo, la joven se crio en un entorno rural antes de mudarse a Canberra para trabajar con Paul Jones, exentrenador de porteras de las Matildas. “Nada más verla, vi que Jada tenía unas manos increíbles y que era una atleta formidable”, señaló Jones. “Muchas de las cosas que vi en Jada las había reconocido en Lydia a la misma edad”.

Paige Satchell (NZL)

Pese a participar brevemente en Francia 2019, la veloz Paige Satchell va camino de ser una opción clave en el ataque de Nueva Zelanda para la Copa Mundial Femenina de 2023. Campeona juvenil de campo a través en su país, Satchell posee un cambio de ritmo extraordinario y es seguramente una de las jugadoras más rápidas del fútbol internacional.

La extremo, de complexión ligera, deslumbró en varios Mundiales juveniles con Nueva Zelanda y ahora ha brillado con el Canberra United en su segunda campaña en categoría absoluta, después de una breve etapa en el SC Sand alemán.