Fecha y lugar de nacimiento: 29 de octubre de 1978, Watford (Inglaterra) 117 veces internacional (46 goles)

Kelly Smith, considerada mayoritariamente como la mejor jugadora que ha surgido nunca en Inglaterra, ha causado un indudable impacto en el fútbol femenino de su país natal. Sigue siendo la máxima artillera histórica de la selección inglesa, con sus 46 dianas en 117 partidos disputados con las Leonas a lo largo de 20 años de carrera internacional.

Smith desempeñó un papel esencial durante el regreso de Inglaterra a una Copa Mundial Femenina de la FIFA en 2007, tras 12 años de ausencia, al firmar un doblete en su debut en la cita mundialista contra Japón.

Sus goles y su icónica celebración –quitándose la bota izquierda y besándola– pudieron verse en todo el mundo, y elevaron su ya prestigioso caché a la condición de superestrella. La delantera acabó marcando otros dos goles en China 2007, antes de que las Leonas se inclinasen ante Estados Unidos en cuartos de final.

Durante la fase final de 2011, su seleccionadora, Hope Powell, la calificó como “una de esas jugadoras que surgen sólo una o dos veces en la vida”, comparándola con “Diego Maradona o Lionel Messi, futbolistas con un talento excepcional”.

Por desgracia, por arrastrar problemas de lesiones –un lastre que persiguió a la súper talentosa delantera durante toda su carrera–, Smith no logró estar a la altura de ese grandilocuente elogio en Alemania 2011, donde fue incapaz de ver puerta en sus 4 partidos.

Así, su trayectoria en los Mundiales femeninos concluyó en un momento de baja forma. Pese a que convirtió su lanzamiento en la tanda de penales del choque de cuartos contra Francia, al cabo de un 1-1, las Leonas acabaron eliminadas tras caer por 4-3 desde el punto fatídico.

Esa iba a ser la despedida mundialista de Smith, ya que una lesión le impidió incorporarse al combinado de Mark Sampson que obtuvo un histórico tercer puesto en Canadá 2015.

Aunque no llegase a levantar el mítico trofeo, no cabe duda de que la ex estrella del Arsenal es una de las figuras preeminentes del fútbol femenino; una grande de su época.

De hecho, Carli Lloyd –ganadora del Mundial femenino de 2015 y elegida 2 veces mejor jugadora del mundo– consideró a Smith como la mejor jugadora con la que ha jugado.

De su primer gol en un Mundial femenino “Cuando metí el primer gol me quité la bota y la besé, ¡y en el segundo gol las dos botas fuera! Había tenido algunas lesiones en el periodo previo a ese campeonato, así que para mí significaba superar la lesión, vivir mi sueño de jugar en la escena mundial y, lógicamente, marcar dos goles. Creo que se podría decir que esos goles son mi mayor logro. Era mi primer Mundial, y marcar en la escena mundial… es la élite; lo mejor de lo mejor. Soy una jugadora de equipo, pero marcar, desde un punto de vista individual, fue increíble”.

De lo que se siente al jugar en un Mundial femenino “Básicamente te pellizcas. Es algo para lo que había trabajado muy duro, y con lo que había soñado desde que era una cría. Cuando estaba en la alineación para escuchar el himno nacional estaba muy emocionada, porque vi a mi padre en el público y, simplemente, supe que había llegado a la gran cita".

"Recuerdo el estadio [en el primer partido contra Japón]. Habías subido muchos peldaños para llegar a saltar al terreno de juego y todas las cámaras estaban sacando fotos; se veían sus luces. Era simplemente increíble, porque nunca había vivido nada semejante en el periodo previo al campeonato”.

De su rival más duro en el Mundial femenino “Estados Unidos, cuando estaba en su apogeo [en China 2007, en los cuartos de final]. Eran muy fuertes en todas las demarcaciones, y eran personas a las que admirabas de verdad, porque tenían un aura a su alrededor. Eran nombres conocidísimos; por el gran nivel del fútbol en Estados Unidos, conocíamos bien a esas jugadoras. Leslie Osborne se encargó de marcarme. A cualquier parte que iba del campo, me seguía".

"No buscaba llegar al balón; su principal misión era frenarme. Era como una avispa zumbando a tu alrededor todo el rato. Simplemente quieres gritar y quitártela de en medio. Es un cumplido, pero en ese momento no te lo tomas así. Ahora recuerdas cómo se organizaron para frenarme, porque yo era el cerebro, la principal jugadora; por tanto, si me frenaban a mí, frenaban a Inglaterra”.