Hacía falta un cambio en el seno de Noruega. Después de rendir por debajo de lo deseable en dos Copas Mundiales de la FIFA™ seguidas –las campeonas de 1995 cayeron en la fase de grupos en Alemania 2011 y en octavos de final en Canadá 2015–, las jugadoras y técnicos de la selección escandinava iniciaron un periodo de profundo examen de conciencia que ha alterado por completo su forma de pensar y actuar dentro y fuera del campo.

La consecuencia es que el equipo ha elaborado una lista de lemas que le han acabado guiando hasta los cuartos de final de Francia 2019, donde se enfrentará a Inglaterra en Le Havre este jueves.

“Nos sentamos tranquilamente con las jugadoras a principios de 2017 y les preguntamos con qué tipo de palabras querían vincularse, y luego les pedimos que hablasen en grupos sobre cómo podían expresar y plasmar esas palabras con sus actos”, explica a la FIFA el ayudante del seleccionador, Anders Jacobsson.

Cuando se decidió la lista de palabras, se pidió a las jugadoras que profundizasen un poco más. “Les pedimos que pensasen en lo que hacen, en cómo y en por qué lo hacen. Y la cuarta pregunta para cada palabra era: ‘¿Qué puedo hacer cuando se vuelve complicado defender estos valores?’”, continúa Jacobsson.

Esa última pregunta se vio puesta a prueba casi enseguida, ya que Noruega se estrelló en la Eurocopa 2017 con 3 derrotas y sin marcar siquiera un solo gol. Sin dejarse abatir por ello, el trabajo de desarrollar los valores compartidos del equipo prosiguió. Catorce meses después, una Noruega revitalizada venció a la vigente campeona de Europa, Países Bajos, para clasificarse directamente para Francia 2019. Desde entonces, sus jugadoras han convertido a esos principios rectores en una parte de sus vidas diarias.

“Lo más importante para mí es que estamos ahí para el resto de compañeras, y que nos apoyamos mutuamente todo el rato”, afirma la extremo Guro Reiten. “La sensación de seguridad que sentimos en este equipo es enorme”.

Jacobsson hace hincapié en la diferencia entre tener normas severas e inflexibles y tener las directrices sobre las que deciden las propias jugadoras: “Si tenemos reglas, da la impresión de que estamos obligando a la gente a comportarse de una forma determinada, pero teniendo directrices, ellas mismas eligen comportarse de la forma adecuada”.

En Francia, las dos palabras más influyentes en las filas noruegas están siendo ‘sterkere sammen’ (“más fuertes juntas”), como ha quedado patente hasta ahora en el terreno de juego.

“Así es como deseamos que se nos perciba como personas; como jugadoras que quieren jugar y ganar, pero también como personas simpáticas y amables, y espero que todo el mundo lo vea así”, concluye Reiten.

Los aficionados que quieran asistir a la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2019 todavía pueden adquirir entradas enwww.fifa.com/tickets, así como en las taquillas de los estadios, para los partidos restantes en los que aún quedan boletos disponibles para el público general.

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