miércoles 24 abril 2019, 11:03

Ellis: "Va a ser un Mundial increíblemente competitivo"

  • La seleccionadora estadounidense ultima los preparativos para el Mundial

  • La campeona de 2015 considera que este será el Mundial más complicado

  • Opina que la flexibilidad táctica y la pelota parada serán claves en el torneo

Jill Ellis está completamente concentrada en el reto más inmediato que le aguarda. Aunque condujo al combinado estadounidense a la conquista de su tercer título mundial en la Copa Mundial Femenina de la FIFA Canadá 2015™, últimamente no se ha entretenido viendo acciones ni momentos de aquella campaña memorable. Ellis, que lleva ya cerca de cinco años al frente de EEUU, no piensa más que en el próximo partido.

FIFA.com la ha entrevistado, y es evidente que Canadá 2015 ha quedado ya muy atrás para ella, y que todo lo que hace en estos momentos va dirigido a tratar de cosechar nuevos éxitos en Francia.

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Estados Unidos suele ser considerada la que marca el rumbo del fútbol femenino. ¿Les preocupa ver que otros países están recortando distancias?

Siempre digo que el hierro con hierro se aguza, así que cada vez que nos vemos ante un desafío es algo positivo, porque nos obliga a seguir esforzándonos. También me da la impresión de que la gente olvida que en 1991 y 1999 esos partidos terminaron con 2-1 y 0-0, y que en muchas de nuestras finales olímpicas la diferencia fue de un gol, así que durante muchísimo tiempo las distancias en el máximo nivel han sido muy cortas.

Creo que donde ha brillado Estados Unidos ha sido por la regularidad que ha tenido a la hora de meterse en esos partidos y afrontar esos momentos, aunque siempre ha sido todo muy ajustado. La gente suele olvidarlo. En nuestro plantel, todas las futbolistas y todo el cuerpo técnico queremos jugar contra los mejores equipos, porque es algo que tiene más significado todavía. Cuanto más difícil es una cosa, más valor tiene hacerla, así que aceptamos de buen grado que todos los demás tengan un nivel muy alto.

Centrándonos en el Mundial, ¿qué tipo de tendencias tácticas ha empezado a detectar en el fútbol y espera encontrar en Francia 2019?

Se ha invertido mucho en muchísimas áreas de nuestro deporte, todo el mundo se ha esforzado por hacerlo, y también por la globalización que se ha experimentado. Creo que, en lo que respecta a este Mundial, la flexibilidad táctica va a ser muy importante como pauta. Ahora vemos cómo los equipos se adaptan a su adversario, estudian determinadas situaciones y tienen flexibilidad en cuanto al sistema o la táctica que aplican.

Se trata del juego de transición, y del momento en el que se pierde o se consigue la posesión de la pelota, eso será fundamental para decantar los partidos. Con la introducción del videoarbitraje (VAR), las jugadas a balón parado van a ser cruciales, una parte muy importante de este torneo.

¿Qué convierte a Francia en el anfitrión ideal de este Mundial?

Tiene la ventaja del título que ha ganado la selección masculina, por supuesto, así que allí hay entusiasmo y energía. También es uno de los países que cuentan con una liga femenina consolidada, por lo que se apoya a la disciplina. Creo que la gente querrá venir a ver los partidos. Es una cultura muy futbolística, y pienso que los aficionados tienen ganas de ver un torneo mundialista en su país, masculino o femenino. Con el apoyo de una hinchada que entiende de fútbol, será un Mundial muy emocionante.

¿Cómo han evolucionado el juego y el nivel de competencia desde que asumió el banquillo del equipo? ¿Diría que este Mundial nos ofrecerá el nivel más alto de juego visto hasta ahora?

En 2015 ya dije que aquel Mundial iba a ser el más difícil de ganar, al aumentar el número de equipos participantes, obviamente. Pero ahora pienso que este va a ser también el más difícil por los muchos buenos equipos que hay. Las selecciones están impulsando el nivel hacia arriba, las personalidades de las jugadoras... nuestra disciplina no deja de crecer. Creo que la gente lo percibe y que va a ser un Mundial increíblemente competitivo que nos dejará muchos momentos memorables.

¿Qué aprendió de sus experiencias en Canadá 2015?

Aprendí muchas cosas. Un aspecto es conseguir que el equipo crezca en el torneo, creo que eso fue importante entonces. Las fases de grupo requieren ir mejorando a medida que transcurre el torneo. Fue una lección importante, saber que a veces no se va a terminar igual que se empieza, así que hay que esforzarse por mejorar según avanza la competición. También hay que disponer de recursos en todas las demarcaciones, para poder cubrir las sanciones y las lesiones que se produzcan. Eso me está ayudando ahora en los preparativos. Hay que asumir la posibilidad de encontrarse con dificultades en el primer partido. Lo importante es saber extraer conclusiones y poder mejorar.

Y el otro aspecto es que no todo tiene que salir a la perfección. No va a ser un camino de rosas. No sé cuántos equipos han ganado todos sus partidos en una serie de siete y han ganado el Mundial. Hay que mantener la concentración y el optimismo, hacer que las integrantes del equipo estén unidas, sin dejar que nos influya nada que venga de fuera. Esas fueron algunas de las grandes enseñanzas de aquel torneo.

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¿Y qué aprendió de la SheBelieves Cup que vaya a servirle en Francia 2019?

Lo principal para mí era que tuviésemos un calendario muy competitivo durante este periodo de preparativos para el Mundial. Las lecciones de la SheBelieves fueron que hay muchísimas cosas que estamos haciendo bien. A estas alturas nuestras jugadoras únicamente han disputado tres o cuatro partidos, y es evidente que hay que reforzar ciertos ámbitos del juego. Hicimos muchísimas cosas positivas, pero en este nivel se pueden pagar caros algunos errores que se cometen, así que el objetivo es conseguir mejorar en las áreas que requieren refuerzo para poder triunfar en Francia, y precisamente por eso jugamos esos partidos.

El torneo me dio muchas respuestas en cuanto al plantel, sobre las cosas que estamos haciendo muy bien y sobre otros aspectos que hay que afinar y en los que debemos centrarnos.

Estados Unidos suma 3 Mundiales, pero nunca ha ganado dos consecutivos. ¿Es una motivación adicional?

Para mí, personalmente, el objetivo es ganar este torneo. No pienso en si será el segundo consecutivo ni en defender el título mundial. Lo que importa es lo que tenemos delante. Esta selección es distinta en cuanto a personalidades, jugadoras y sistema. Hay muchas diferencias y para nosotras es una nueva andadura.

No pienso en lo que ha ocurrido antes. Ahora de lo que se trata es de conseguir que este plantel esté listo para responder en junio y en julio. Me preocupa este camino que estamos recorriendo y no el pasado.