sábado 07 julio 2018, 04:03

Los Diablos Rojos se ponen el mono de trabajo

  • ​Bélgica se impuso a Brasil en cuartos (2-1)

  • Los Diablos Rojos marcaron la diferencia mentalmente

  • La próxima cita con la historia, ante Francia. Sigue, el Blog en VIVO

De Simon Massart, con Bélgica.

Bélgica sabía que no podría ganar un concurso de belleza contra Brasil. Por eso, este viernes en Kazán prefirió proponer otro juego en los cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018. Las reglas las dictó Roberto Martínez con arreglo a sus jugadores, con la consigna de ponerse el mono de trabajo para hacer más efectivo el talento de sus pupilos. Atrayendo muy atrás a los pentacampeones mundiales, los belgas se aventuraron en su parcela de juego favorita: los grandes espacios.

Los Auriverdes no sintieron llegar el golpe, tras haber visto cómo Fernandinho facilitaba la tarea a Bélgica marcando en propia meta en el minuto 13. “Teníamos un plan, y lo aplicamos a la perfección”, confirma Romelu Lukaku a FIFA.com.

Les dije a mis compañeros justo antes del partido que no había que tener miedo porque teníamos recursos para vencer a este gran Brasil, con la condición de pensar solamente en términos colectivos”, precisa el delantero, autor de una carrera de unos 40 metros para dejar a Kevin De Bruyne en posición de doblar la renta.

La jugada ilustra por sí sola las palabras de Lukaku, que entregó su traje de goleador al centrocampista a cambio de su atuendo de habitual pasador.

Como buen estratega, Martínez comprendió que sus Diablos necesitaban transformarse en soldados para su plan de batalla, y Marouane Fellaini fue el primero en lanzarse de cabeza para ir al frente. “El Mundial no respeta el talento; solamente respeta a los equipos. Mis jugadores no son solo talentosos; también poseen grandes recursos psicológicos y humanos. Eso era muy necesario para realizar la gesta suprema en la cita mundialista: eliminar a Brasil”, insiste el seleccionador con una sonrisa en los labios.

El discurso post-partido de Thomas Meunier también tenía tintes de batalla épica. “Hoy no he disfrutado ofensivamente. Solamente han sido sacrificios, y no soy el único…”, subraya el hombre que vale para todo en la banda derecha belga y que, con todo el dolor de su corazón, se perderá por sanción la próxima semifinal contra Francia.

“Debo felicitar también a De Bruyne, Hazard y Lukaku, que lo han dado todo por el equipo gracias a sus movimientos, sus carreras y su entrega al servicio del colectivo”.

"El colectivo siempre antes que lo individual. Esta tarde, hemos logrado una hazaña". Thomas Meunier

Tras el intenso esfuerzo, llegó el momento de celebrarlo. Y los jugadores quisieron hacerlo todos juntos en el vestuario. A continuación, los Diablos invitaron a sus aficionados a desatar sus emociones y disfrutarlo. Bélgica llevaba sin derrotar a una selección ubicada entre las 3 primeras plazas de la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola desde 2002, cuando se impuso a… Francia.

Los soldados de Martínez desembarcaron en Rusia con la voluntad de hacer honor al eslogan Red devils on a mission (“Diablos Rojos en misión”) que luce el autobús que ya los ha transportado a cinco estadios, con pleno de victorias. Frente a Brasil, mostraron en toda su dimensión el arsenal del que disponen, listo para un nuevo combate.