lunes 27 junio 2016, 10:08

Gervinho, líder de unos renovados Elefantes

***En agosto de 2014, el fútbol marfileño estaba de capa caída. Unas semanas antes, su selección había dicho adiós a la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™ en la primera ronda. Y el 8 de agosto, lo que muchos aficionados temían acabó pasando: Didier Drogba anunciaba su retirada del combinado nacional. “Es el momento adecuado para dejarlo, dar paso a los jóvenes y construir un equipo para los próximos años”, explicó el delantero, entonces de 36 años. Por ironías del destino, con uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol africano, los Elefantes* no ganaron ni un solo título. Y sin él, Costa de Marfil se adjudicaría la Copa Africana de Naciones al año siguiente.

Gervais Kouassi, más conocido como “Gervinho”, que se había estrenado y progresado junto al ídolo del país, tomó el testigo para liderar el ataque y conducir al equipo a la conquista de su segundo título continental. El artillero de 29 años —que se formó en Bélgica, se dio a conocer en Francia y confirmó su categoría en Inglaterra e Italia— viste desde enero de 2016 los colores del Hebei China Fortune, recién ascendido a la primera división de la RP China.

Desde allí ha mantenido una charla con FIFA.com en la que habla de esta nueva experiencia, el regreso de los Elefantes a la cima de África y el camino a Rusia 2018.

Gervinho, ¿cómo están siendo sus primeros meses en la RP China, donde ya se ha ganado a sus compañeros y a los hinchas locales? Todo está yendo muy bien aquí. El club lo hace todo para facilitar nuestra integración, y no sólo en el aspecto deportivo. De momento, eso se refleja en los resultados, y ojalá continúe. Ha estado muy bien descubrir la vida china, la gente es muy acogedora y Qinhuangdao es una ciudad muy linda. Ya conocía el estadio, porque jugué un partido en él durante los Juegos Olímpicos de 2008.

Desde su Costa de Marfil natal a la RP China, su trayectoria lo ha llevado por numerosos países y distintos equipos, en los que siempre ha triunfado. ¿Qué le ha permitido conservar esa regularidad? ¡El trabajo, solamente eso! Desde la cantera del ASEC Mimosas, donde nos inculcaron esa disciplina del trabajo. Sin ella, no puede funcionar nada. Y hoy en día, gracias a haber pasado por todas estas ligas, he acumulado experiencia, y eso ayuda a adaptarse a todas las situaciones. Al llegar a China, ya sabía que no iba a ser fácil, porque el nivel de los equipos chinos es bastante alto.

Durante las giras con el Arsenal nos habíamos cruzado varias veces con equipos asiáticos. Y el nivel ha aumentado todavía más con la incorporación de importantes futbolistas extranjeros. ¡El jugador que piense que esta liga es fácil no tardará en llevarse una desilusión!

¿Y con qué se ha quedado de cada etapa de su trayectoria? Todos los clubes por los que he pasado me han aportado muchísimo. El Beveren fue el aprendizaje del mundo profesional y la vida europea. Mi etapa en el Le Mans me permitió convertirme en internacional. En el Lille gané la liga y la copa, y también varias distinciones individuales. El Arsenal es la liga inglesa, el equipo en el que siempre había querido jugar desde que entré en el centro de formación. ¡Fue algo mágico! Y antes de fichar por un club chino, descubrí la liga italiana con el AS Roma, un equipo con una afición increíble que merece ganar la liga todos los años.

¿Y qué papel tuvo el entrenador Rudi García en su trayectoria? Nunca he ocultado que coach Rudi ha sido muy importante en mi carrera. Jugué a sus órdenes en el Le Mans, y luego en el Lille y el Roma. Desde el principio, hubo una muy buena química entre nosotros, incluso al margen del fútbol. Me ha ayudado a ser el futbolista que soy actualmente.

Hablemos de su selección. Con más de 70 internacionalidades, ¿qué función desempeña ahora en ella, como segundo jugador que más veces ha vestido la camiseta nacional, después de Salomon Kalou? Ahora soy el capitán. Jugué con Salomon en las categorías inferiores de la selección, y nuestra trayectoria en la absoluta es muy parecida. Ser capitán de este equipo supone un gran orgullo, y espero que sigamos en la misma línea. Estamos en una fase de transición, porque el plantel es joven, y se han ido muchos veteranos. El listón está alto, porque somos los actuales campeones del continente, hasta que se celebre la próxima CAN, en Gabón. El objetivo en estos momentos es la clasificación, y luego defender nuestro título.

En el plantel de Costa de Marfil figuran algunos de los mejores jugadores de África, pero el equipo nunca ha conseguido superar la fase de grupos del Mundial. ¿Cómo se explican esos fracasos? Ya llevamos tres participaciones consecutivas, y siempre nos han tocado grupos bastante difíciles. En el último Mundial, todos apostaban por que pasásemos a la segunda fase. Por desgracia, los últimos minutos contra Grecia no nos fueron favorables . No creo que se deba a la preparación.

La derrota del segundo partido, contra Colombia , nos hizo daño, después de haber empezado bien ganándole a Japón . Y todo se decidió en los últimos minutos, Grecia estuvo más viva que nosotros. No vamos a reescribir la historia, pero la experiencia resultó útil, sobre todo para nuestro triunfo en la última CAN.

En 2006, usted tenía 19 años, y descubría el fútbol profesional en el Beveren. ¿Cómo vivió la histórica clasificación de Costa de Marfil para su primer Mundial? ¡Fue algo genial! Y además, por cómo se produjo... Había que esperar el resultado de Camerún. Eso quitó los complejos a nuestra selección. Se hizo una vez, y luego nos clasificamos siempre para los demás torneos. También nos ayudó mucho a los jóvenes como yo. La gente podía ubicar a Costa de Marfil en el mapa. Y, sobre todo, permitió que los jugadores marfileños se exportasen mejor. Desde entonces, ha habido un importante contingente en Europa, y fue también gracias a eso.

¿Esta generación de los Elefantes es la mejor de la historia de la selección? Siempre hemos tenido una selección potente. Resulta difícil decir si esta generación es la mejor o no. Participar en las tres últimas competiciones nos ha permitido mostrarnos ante todo el mundo. Eso ayuda a aumentar la popularidad del equipo. Y ahora todos los jugadores compiten en ligas con mucha atención mediática.

¿Qué opciones hay de obtener la clasificación para un cuarto Mundial consecutivo? Sería estupendo que Costa de Marfil se clasificase por cuarta vez consecutiva para la fase final del Mundial. De momento todavía estamos compitiendo por la clasificación. En África las plazas son más difíciles de conseguir que en otros sitios, porque sólo hay cinco puestos reservados a las naciones africanas. Pero tenemos posibilidades reales, y vamos a pelear para hacer un buen papel.

¿Qué objetivos se ha fijado para el año 2016 con el Hebei China Fortune y con la selección? Con mi club, el objetivo de este año consiste en terminar entre los ocho primeros. Ahora mismo somos segundos, detrás del Guangzhou Evergrande, así que no está nada mal. Con la selección, la meta es clasificarnos para la próxima Copa de África, en Gabón, y defender allí nuestro título. Y también pensamos en los clasificatorios del Mundial de Rusia. Una nación como Costa de Marfil está obligada a participar siempre en las fases finales del Mundial.