****Hasta hace muy poco, la modesta selección de las Islas Feroe no solía conseguir resultados alentadores en los partidos de clasificación. A las órdenes de Lars Olsen, sin embargo, este archipiélago en el Atlántico Norte ha registrado en los últimos tiempos victorias y empates importantes contra rivales imponentes.

Primero se produjo el triunfo a doble partido, en casa y a domicilio, sobre Grecia en los preliminares de la EURO 2016 de la UEFA, y después un empate y una victoria a domicilio, contra Hungría y Letonia respectivamente, en los clasificatorios para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™. Una gesta notable para un país de apenas 50.000 habitantes.

Gracias a estos estimulantes resultados, la nación ha escalado hasta el puesto 74ª de la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola, el más alto de su historia, y se sitúa actualmente por delante de Noruega, Bulgaria o Finlandia. Aunque es posible que, en el pasado, sus rivales la hayan tomado un tanto a la ligera, las cosas están empezando a cambiar.

“Hemos mejorado en los dos últimos años, y creo que seguimos avanzando cada vez más”, explica el seleccionador Olsen a FIFA.com. “Antes nos costaba muchísimo ofrecer un buen rendimiento a domicilio, pero recientemente hemos conseguido dos victorias como visitantes: en Grecia y ahora en Letonia.

“Para nosotros es importante darnos cuenta de que podemos ganar fuera de casa. Confío en que sigamos mejorando, que consigamos más puntos y que sigamos subiendo en la tabla mundial. No será tarea fácil, porque como los rivales ya no nos infravaloran, resulta mucho más complicado arrancarles puntos”.

Emparejada con Suiza, Hungría, Letonia, Andorra y la campeona de Europa, Portugal, en el Grupo B de la competición preliminar de Rusia 2018, Islas Feroe comparte el tercer puesto de su sección después de tres partidos disputados. Tras empatar con Hungría e imponerse a Letonia, el mes pasado afrontó el descomunal reto de enfrentarse al Portugal de Cristiano Ronaldo, un partido que terminó perdiendo por 6-0 en Torshavn.

“Estoy satisfecho con el principio de esta campaña, pero en nuestro último partido, contra Portugal, jugamos a medio gas”, asegura el técnico. “Si no lo damos todo, perderemos contra quien sea, contra Portugal o contra Andorra”.

“El rendimiento, en mi opinión, es lo más importante, porque, si jugamos al máximo, podemos plantear muchos problemas a cualquier equipo”.

El espíritu de 1992 Enfrentarse a campeones de Europa no es algo nuevo para Lars Olsen. En una de las campanadas históricas más celebradas del fútbol, el exdefensa capitaneó a Dinamarca hasta la gloria en la Eurocopa de 1992, a pesar de que originalmente el país no se había clasificado para la competición y entró en ella a última hora sustituyendo a Yugoslavia.

Dinamarca eliminó a las potencias europeas tradicionales para ceñirse la corona de Europa y convertirse en un ejemplo para todas las naciones pequeñas, como las Islas Feroe de Olsen, y en un recordatorio de que, en el fútbol, se puede derribar incluso a los más poderosos.

“Siempre les digo a mis jugadores que, en el fútbol, todo es posible, porque lo he vivido en primera persona en 1992”, afirma Olsen. “Aquel fue el mejor momento de mi carrera de jugador. Sorprendimos a todos y, ni que decir tiene, me siento muy orgulloso de ello. Dinamarca es un país pequeño, y ganar el Campeonato de Europa supone una gesta descomunal, quizá lo más importante que le haya ocurrido nunca al deporte danés. Vivimos momentos fantásticos”.

En su empeño por seguir escalando posiciones en la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola y ampliar sus éxitos en la competición preliminar del Mundial, las gestas de Olsen con la selección danesa de 1992 no constituyen las únicas fuentes de inspiración para las Islas Feroe. La vecina Islandia, con su hazaña en la última Eurocopa, ha demostrado que los modestos ya no lo son tanto.

“Todos en las Islas Feroe nos sentimos muy orgullosos de Islandia y de lo que ha conseguido”, revela Olsen. “Es nuestra vecina más cercana, tenemos un clima y un estilo de vida muy parecidos, y es una inspiración para nosotros”.

“En las Islas Feroe no tenemos estrellas, y lo mismo puede decirse de Islandia. Aunque los islandeses tienen a Gylfi , que juega en Inglaterra, la estrella es el equipo. En nuestro caso sucede igual”.

Suiza acapara la atención El fútbol en las Islas Feroe debe superar continuamente muchos obstáculos, entre ellos el paisaje rocoso y el clima oceánico subpolar del país. Por delante tiene ahora un exigente clasificatorio para el Mundial contra una avezada Suiza el 13 de noviembre, otro reto importante para Olsen.

“Nuestra liga ha terminado hace poco, de manera que debo asegurarme de que los jugadores lleguen muy bien preparados para el partido contra Suiza”, explica. “Será muy complicado. En el último encuentro, contra Portugal, perdimos por 6-0, pero creo que la visita a Suiza nos exigirá todavía más, porque jugaremos a domicilio. Sin embargo, después de la derrota ante Portugal, me parece que debemos salir a demostrar lo que somos capaces de hacer”.

Mientras la selección se prepara para enfrentarse a la Nati, un combinado con más solera en la competición, los últimos resultados demuestran que los locales harían bien en no subestimar al motivado equipo de Olsen.