lunes 04 julio 2016, 04:31

La madurez de Koulibaly

Los aficionados al fútbol tienen muchas formas diferentes de expresar su apoyo a los jugadores, pero el pasado febrero se produjo una muestra de solidaridad especialmente inusual y conmovedora antes de un encuentro de la Serie A italiana, cuando miles de hinchas del Nápoles sostuvieron fotografías de Kalidou Koulibaly por delante de sus rostros.

El acto de protesta de los aficionados Partenopei tuvo lugar durante el partido del Nápoles contra el Capri, y fue una muestra de solidaridad con el espigado defensa central de 25 años, que unos días antes había sido objeto de insultantes cánticos racistas por parte de seguidores del Lazio. El árbitro llegó a interrumpir el partido y solamente lo reanudó unos minutos después, tras discutir del asunto con ambos equipos y sus entrenadores.

El jugador, que en los últimos días ha sido muy vinculado con un traspaso al Chelsea, señala que intentó ignorar los cánticos: “Al principio no les presté demasiada atención, pero cuando el árbitro tuvo el coraje de suspender el partido, lo entendí", dice Koulibaly a FIFA.com. "Me apoyaron mis compañeros, los jugadores del Lazio vinieron a hablar conmigo y, después del encuentro, recibí muchas muestras de apoyo”.

Antes de su siguiente encuentro liguero, unos días más tarde, un grupo de hinchas del Nápoles emitió un comunicado que pedía a los aficionados que imprimiesen una foto del defensa para lucirla frente a sus rostros. Miles de seguidores respondieron al llamamiento y, cuando Koulibaly entró en el estadio, contempló la muestra de solidaridad. “Cuando vi a nuestros aficionados con la foto en frente de sus caras, me emocionó de veras”, confiesa.

Afortunadamente, ese incidente fue lo único que empañó un poco la temporada de Koulibaly, quien, por lo demás, estuvo sobresaliente sobre el césped. El joven defensa jugó todos los encuentros ligueros del Nápoles menos tres, en una campaña que se saldó con el subcampeonato por detrás del Juventus y la clasificación para la Liga de Campeones. Un presente auspicioso que, además, se extiende con la selección de Senegal.

En alza Koulibaly nació en Francia de padres senegaleses, e inició su carrera profesional en segunda división con el Metz, antes de firmar un contrato de cuatro años con el Racing Genk belga en 2012. Sin embargo, al cabo de dos años, el Nápoles hizo al Genk una oferta que no pudo rechazar.

El zaguero no tardó en ganarse la titularidad en la escuadra napolitana y, desde entonces, todo le ha ido sobre ruedas. Hace unos meses, todo un Diego Armando Maradona afirmó que Koulibaly era el mejor defensa de la Serie A. “Puede jugar en cualquier equipo grande”, resaltó el legendario ex jugador de Argentina y del Nápoles.

Aunque Koulibaly jugó con Francia en categorías menores, el año pasado decidió unir su destino al de la selección de Senegal, con la que debutó el pasado septiembre en un clasificatorio para la Copa Africana de Naciones 2017 contra Namibia. Los Leones de la Teranga son el único combinado que ostenta un pleno de victorias en la competición preliminar antes de encarar la última jornada de la liguilla, y ya tiene asegurado el billete para la fase final de Gabón.

Koulibaly admite que está encantado con la buena racha de Senegal, y rechaza que haya gozado de un grupo sencillo, con Burundi, Namibia y Níger como rivales: “Cada vez que una selección se enfrenta a Senegal, quiere hacerlo lo mejor posible, y cada compromiso es siempre diferente. Aunque sólo llevo en la selección desde septiembre, ya estoy soñando con jugar la fase final de la Copa Africana de Naciones”.

¿Rumbo al Mundial? Una vez conseguido el billete para Gabón 2017, Senegal centrará su atención en la clasificación mundialista para Rusia 2018. El combinado de África occidental ha quedado encuadrado en el mismo grupo que Sudáfrica, Burkina Faso y Cabo Verde, y disputará las dos primeras jornadas en octubre y noviembre. “Son rivales de calidad, pero nuestro equipo es fuerte en todas sus líneas y tenemos talento”, resalta Koulibaly.

La única vez que los Leones de la Teranga participaron en la máxima competición futbolística fue en 2002, cuando causaron sensación derrotando a la campeona mundial, Francia, y llegando a cuartos de final. “Nuestro seleccionador, Aliou Cissé, el coordinador de la selección, Lamine Diatta, y el entrenador de porteros, Tony Sylva, jugaron en ese Mundial. Nos han contado sus experiencias, y queremos revivirlas”, asevera el defensa.

Koulibaly se deshace en elogios hacia el ex capitán Cissé: “Desde que lo nombraron seleccionador el año pasado, ha reconstruido el equipo. En poco más de un año, ya ha conseguido buenos resultados. Sé que en Senegal, los aficionados y la prensa son exigentes, y es normal. Pero necesitamos tener tiempo”.

“El seleccionador es muy profesional. Es exigente y, en ocasiones, llega a ser duro, pero a los jugadores nos está viniendo bien. Su ambición es convertir a Senegal en una de las mejores selecciones de África, y lo conseguirá. Senegal tiene recursos para lograrlo y ganar títulos. Puede que estemos a punto de escribir el principio de una bonita historia”, concluye.