Por años, el balompié ni siquiera fue el deporte más popular del país, pero los tiempos han cambiado y, Panamá poco a poco se ha convertido en una potencia del fútbol centroamericano hasta el punto de quedarse a las puertas de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™. Dos goles recibidos en los últimos minutos de su partido en casa ante Estados Unidos le cerraron el camino de una forma dramática.
Ésa ha sido una dolorosa constante para los Canaleros en estos años de ascenso. Varias veces se han quedado a centímetros de la gloria, sólo para ver con impotencia cómo ésta se les escapaba de las manos en el último suspiro.
Tras otra descorazonadora derrota ante Costa Rica en su más reciente partido camino a Rusia 2018, Panamá se prepara ahora para una doble fecha clasificatoria en la que confía en enmendar su error. "Nos ha faltado ese pasito", reconoce el delantero Luis Tejada, una de las estrellas Canaleras, en su charla con FIFA.com.****
Cuestión de concentración 17 de noviembre de 2015. Tras una espectacular victoria en Jamaica, Panamá recibía a su archirrival Costa Rica en el segundo partido de la tercera fase clasificatoria de la CONCACAF hacia Rusia 2018. Un triunfo significaba un paso de gigante rumbo al Hexagonal Final. La expectación era máxima, la esperanza, también.
Durante la primera hora de juego, el duelo no pudo ser más cerrado. Sin embargo, al cabo de tres minutos, dos goles en contra pusieron a los Canaleros contra la pared. Luis Tejada logró anotar un descuento, pero no fue suficiente, y la sensación era que Panamá había dejado escapar la oportunidad… otra vez.
“Estábamos jugando bien”, lamenta el atacante del Juan Aurich peruano, “pero llegaron errores, desconcentraciones que tuvimos y los Ticos nos las cobraron. Creo que Panamá hizo un buen partido, todo el mundo corrió, metió, luchó... pero nos faltó un poco de suerte”.
La decepción se unía a la del citado empate con Estados Unidos que privó a Panamá de su estreno mundialista, o, yendo más atrás en el tiempo, a las finales de Copa Oro perdidas en 2005 y 2013. Nadie mejor que Tejada, que las vivió de cerca, para tratar de explicarlas.
“Nos hace falta ese pasito, porque a veces lo hacemos todo bien y al final nos caemos. Tenemos que ganar ese tipo de partidos para romper esa historia, y así van a llegar los títulos y las clasificaciones a Mundiales. Estamos aprendiendo, corrigiendo. Somos un equipo humilde y trabajador. Tenemos fe”, analiza con honestidad este artillero de 33 años.
Análisis y visión Y precisamente esa capacidad autocrítica que muestra Tejada es la que han decidido aplicarse el técnico Hernán Darío Gómez y el resto del equipo. “Se habló mucho (después de la derrota con Costa Rica). El ‘Profe’ nos dijo que si hubiéramos empezado ese partido como lo terminamos, hubiera sido distinto. Porque al final le pasamos por encima a Costa Rica, los metimos en su arco. Analizamos cómo mejorar para que no nos vuelva a pasar algo así”.
Y la oportunidad de redención ha llegado al fin. Panamá enfrenta dos partidos trascendentales ante Haití en los próximos días. El primero el viernes 25 en Puerto Prínicipe y el segundo, el martes 29 en casa. Dos triunfos permitirían a los panameños alcanzar nueve puntos y colocarían el navío con la proa firmemente orientada hacia el Hexagonal.
“Ellos no han conseguido puntos, pero son muy complicados, fuertes y rápidos”, considera Tejada. “Tenemos que ser inteligentes, tratar de tener siempre el balón. A los equipos caribeños no les gusta que les impongas el ritmo del partido, prefieren que sean partidos físicos, así que la clave es la paciencia, defender con el balón en los pies y no caer en el tipo de juego que ellos planean imponer”.
Seis puntos y la posibilidad de cambiar el cuento. Y a partir de ahí, el cielo sería el límite para Panamá. Tras los partidos de marzo, la siguiente cita será la Copa América Centenario, donde los Canaleros tendrán todos los reflectores encima, al enfrentar al campeón Chile y a la Argentina de Lionel Messi. Y, con la misma mezcla de entusiasmo y cautela, Tejada sueña también con dar ese pasito adelante ante los mejores del mundo. “Cualquiera quisiera estar ahí. Son esas ocasiones en que uno pide que no se lesione o se enferme, estar al 100% para que lo tengan en cuenta en la selección. Me encantaría jugar esos partidos. Pero primero viene Haití, y después, con los seis puntos en la bolsa, podremos enfrentar a quien sea”.