martes 24 abril 2018, 11:38

Mahmoud Trezeguet, uno de los pilares de Egipto

  • Mahmoud Trezeguet ayudó a Egipto a regresar a un Mundial tras 28 años de ausencia

  • Es uno de los pilares de los Faraones en los dos últimos años

  • Tras marcharse a Europa en 2015, está firmando una gran campaña en el Kasimpasa turco

El astro egipcio Mahmoud Hassan Trezeguet se ha ganado la confianza del seleccionador Héctor Cúper, hasta el punto de convertirse en uno de los pilares de la selección de Egipto que va a disputar la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018.

Tras haber contribuido a obtener el billete a Rusia al cabo de la fase de clasificación africana, el atacante -apodado Trezeguet en su país por su aparente parecido físico con el exjugador francoargentino David Trezeguet- quiere concentrarse en la fase final.

Sin duda, ése es el motivo que le inspira para estar brillando actualmente en la liga turca con el Kasimpasa. Así se ha convertido en un jugador imprescindible para los Faraones, del mismo modo que Mohamed Salah.

Después de la concentración de Egipto en Suiza y de la buena actuación del equipo contra Portugal, Trezeguet concedió una entrevista a FIFA.com, en la que habla del complicado camino hacia la clasificación, de sus aspiraciones y muchos otros temas.

El Mundial se va acercando. ¿Qué representa para usted la perspectiva de disputar una competición de ese calibre? Sueño con ello desde que era muy pequeño. Todo futbolista espera jugar algún día un Mundial. Me he esforzado mucho en los últimos años para cumplir ese sueño. Antes de morir, mi padre me pidió que contribuyese al regreso de Egipto a un Mundial. Me gustaría tanto que viese mis hazañas con la selección… Estoy orgulloso de haber cumplido su deseo, y le dedico esta participación.

La fase de clasificación fue larga y difícl. ¿En qué momento sintió que estaba al alcance la gesta de clasificarse? Ya no hay partidos fáciles en África. Empezamos la segunda ronda clasificatoria con una derrota ante Chad (1-0). En la vuelta ganamos por 4-0, pero ese traspié fue un aviso. Nos puso frente a frente con nuestras responsabilidades. Cada vez que nos reuníamos, nos decíamos que no había que desaprovechar la ocasión y debíamos concentrarnos en losentrenamientos y los partidos, sin hacer caso de las críticas. Teníamos la sensación de que nuestro objetivo era difícil de conseguir, pero que con paciencia y trabajo, podríamos cumplir el sueño de todo el pueblo egipcio.

La clasificación no se debió solamente a los jugadores y al cuerpo técnico. La Federación nos ha ayudado mucho, así como los medios de comunicación y los aficionados. Nuestros clubes también han tenido en cuenta la importancia de la selección y, gracias a Alá, nuestros esfuerzos se han visto recompensados.

Usted es una de las piezas fundamentales del equipo de Cúper, pero en el partido decisivo contra el Congo, fue suplente. En 30 minutos, todo se puso patas arriba. Háblenos de ese encuentro en Borg Al Arab... Tras el empate entre Uganda y Ghana del día anterior, la clasificación estaba casi garantizada, y los aficionados ya lo estaban celebrando anticipadamente en las gradas. Sabíamos que el partido sería complicado porque Congo no tenía nada que perder. Yo entré en el segundo periodo y cobramos ventaja con un gol de Mohamed Salah, pero cuando a dos minutos del final los congoleños empataron, nos quedamos como fulminados.

Sus estadísticas como internacional

  • Fase de clasificación mundialista: 6 partidos (4 como titular), 356 minutos.

  • Copa Africana de Naciones 2017: 6 partidos (todos como titular), 484 minutos.

  • Copa Mundial Sub-20 de la FIFA 2013: 3 partidos (todos como titular), 240 minutos.

Su palmarés con Al Ahly

  • 1 liga y 2 Supercopas de Egipto.

  • 2 Ligas de Campeones de la CAF, 1 Copa Confederación de la CAF y 2 Supercopas de África.

  • 2 Copas Mundiales de Clubes de la FIFA disputadas (2012 y 2013).

¿Cómo vivió el equipo esos minutos locos? ¿Cómo contribuyó usted a cambiar el rumbo del encuentro? Normalmente, los jugadores habrían bajado los brazos, pero nosotros volvimos a motivarnos. Les metimos presión durante el tiempo añadido. Yo me planté dentro del área. Llegó un balón, pero un defensa me hizo  caer. La segunda vez, decidí lanzarme hacia el balón, fuesen cuales fuesen las consecuencias. Me hicieron falta y obtuvimos una pena máxima, que Salah convirtió. En ese instante, sentimos que nuestro sueño se cumplía por fin. La clasificación estaba conseguida con el pitido final. Era un partido histórico: habíamos hecho feliz al pueblo egipcio y a todos los árabes que nos apoyaron en ese partido.

A su juicio, ¿qué probabilidades tiene Egipto de clasificarse en su grupo? Es un grupo difícil. Rusia juega en casa y ante su público. Uruguay ya ha ganado la competición y posee grandes jugadores. Y el partido contra Arabia Saudí será como un derbi. Para clasificarnos, tendremos que prepararnos bien y llegar a Rusia con confianza y concentración. Vamos a tener que jugar cada partido como una final. El amistoso que jugamos contra Portugal, la vigente campeona de Europa, va a servirnos de referencia. No debemos temer a nadie en el Mundial.

Pese a su juventud (23 años), goza de la confianza de Cúper. ¿Cómo piensa conservar su puesto de titular en el Mundial? Llevo desde muy pequeño trabajando con mucha seriedad en los entrenamientos, y eso se refleja en mis actuaciones en los partidos. Con Cúper, aproveché mi oportunidad en cuanto se presentó, y también he trabajado mucho. Es un entrenador que respeta muchísimo a los jugadores que se esfuerzan sobre el terreno de juego y que respetan las consignas. Así es como me gané su confianza y participé en todos los partidos de clasificación. El año pasado, disputé incluso la Copa Africana de Naciones. Le agradezco lo que ha hecho por mí, y le prometo seguir progresando en las próximas semanas.