sábado 12 noviembre 2016, 03:01

México rompe el maleficio (1-2)

México rompió el maleficio de Ohio y venció a Estados Unidos como visitante por 2-1 en el comienzo del Hexagonal Final de la Zona Norte, Centroamérica y Caribe para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™. El encuentro se jugó el viernes 11 de noviembre en Columbus.

El Tri jamás había ganado, ni siquiera convertido un gol, jugando en este estado y no vencía en Estados Unidos por eliminatorias desde 1972. Pero esa racha de cuatro partidos consecutivos con derrota por 2-0 llegó a su fin gracias a un cabezazo en el primer palo del eterno Rafael Márquez (89’, 1-2).

El equipo de Juan Carlos Osorio jugó un gran primer tiempo, ejerciendo mucha presión en el mediocampo y llegando con mucha velocidad a posiciones ofensivas. A Estados Unidos le costó hacer pie y sufrió en exceso, principalmente por las bandas.

Los visitantes tuvieron un cabezazo de Carlos Vela en el travesaño, un remate de en el palo de Yasser Corona y el gol de Miguel Layún. El lateral presionó sobre la disputa de Michael Bradley y De los Santos y no dudó en sacar el latigazo, que se metió abajo tras rozar en un defensor (20’, 0-1).

La curiosidad de la etapa inicial estuvo en los dos cambios por lesión que debieron hacer los técnicos: primero fue Andrés Guardado, que salió para dejar su lugar a Carlos Salcedo. Luego, Tim Howard sintió una molestia muscular y el arco local pasó a ocuparlo Brad Guzan.

Las manos de Talavera, la cabeza de Rafa La baja de uno de sus referentes tocó a México, que en el complemento ya no fue el mismo equipo. Estados Unidos ajustó el medio y se adueñó del partido. Rápidamente consiguió la igualdad por medio de Bobby Wood en una contra eléctrica (49’, 1-1) y eso le dio confianza.

Alfredo Talavera se fue haciendo figura: los intentos de Omar González, Bradley y Wood murieron en sus manos. El Tri sólo podía ser peligroso de contragolpe y Chicharito Hernández tuvo su gran chance tras un jugadón por la derecha de Hirving Lozano. Cerró milagrosamente Fabian Johnson cuando los mexicanos ya gritaban gol.

Cuando el partido parecía morir en empate, apareció imperial Márquez en el área rival y México festejó una victoria histórica.