viernes 19 agosto 2016, 12:06

Paredes, la 'Hormiga' que se animó a cambiar

  • Paredes, no sobran laterales por derecha, ¿se anima a jugar ahí?

Corría septiembre de 2010, la Copa Mundial de la FIFA de Sudáfrica empezaba a ser un recuerdo y el colombiano Reinaldo Rueda, que llevaba un mes como seleccionador de Ecuador, citó por primera vez a Juan Carlos Paredes con la idea de cambiarle la posición en la cancha.

La Hormiga era un futbolista formado de 23 años, pero la posibilidad de vestir la camiseta no permitía dudas y contestó que sí sin pensarlo dos veces.

Además, no era la primera vez que un técnico le pedía algo semejante. Un año antes, el argentino Guillermo Duró le había sugerido dejar su posición de toda la vida, la de delantero por afuera, para usarlo como mediocampista derecho en el Deportivo Cuenca de Ecuador.

"'Eres rápido, tienes más espacios y ahí rendirás mejor', me dijo. ¡Y tenía razón! Esos mismos conceptos me sirvieron para cumplir del lateral y bueno, aquí me tiene", exclama risueñamente Paredes a FIFA.com desde Inglaterra, donde lleva dos temporadas jugando en ambas posiciones para el Watford.

Fue Rueda, entonces, quien lo hizo debutar en la selección en un amistoso contra México días después de aquella charla. Atlético, abnegado para marcar y criterioso para pasar al ataque, mostró desde el vamos condiciones para el puesto, y se convirtió en un habitual de las convocatorias.

Aceptación, madurez y titularidad Por eso le extrañó cuando el mismo Rueda lo dejó afuera de la lista para la Copa América 2011. "El Profe evaluó que había bajado mi rendimiento, respeté su decisión y seguí trabajando. A la vuelta del torneo volvió a llamarme y ya no salí más del plantel", dice este admirador del brasileño Maicon y el alemán Philip Lahm.

Su afirmación no es exagerada: desde junio de 2012 hasta noviembre de 2015, Paredes jugó 42 partidos consecutivos como titular en la selección, incluyendo 14 de los 16 del clasificatorio para Brasil 2014 y los tres del Mundial. Allí el Tri no superó la fase de grupos, pero su rendimiento le valió la continuidad con su actual seleccionador Gustavo Quinteros.

La racha terminó en marzo de este año, cuando una lesión muscular lo marginó del duelo ante Paraguay en Quito por la quinta fecha de la eliminatoria para Rusia 2018, en un 2-2 que puso fin al arranque perfecto de Ecuador. "Ni me siento titular ni me preocupan las estadísticas, sólo deseo cumplir y aportar lo mío. Lamenté no estar para ayudar al equipo".

Si bien la prensa celebró su regreso en la jornada siguiente, Paredes no pudo hacer nada para evitar la caída con Colombia por 3-1. Aún sí, Ecuador marcha segundo con los mismos puntos que el líder Uruguay, y aspira a una plaza mundialista. "Hasta aquí estamos satisfechos. Si comparas con la eliminatoria anterior hemos sacado mejores resultados de visitante. Maduramos".

Cualidades y aspiraciones Ser positivo es una de las virtudes de Paredes, lección que aprendió de su mamá Carlina. "Perdí a mi papá a los 3 años, y ella ha cumplido ambos roles desde entonces. Siempre me apoyó, incluso cuando rompía los zapatos por jugar a la pelota en la escuela", recalca con nostalgia de la buena.

En la casa de su Esmeraldas natal juntó fuerza para pasar los tragos amargos del fútbol, como aquella vez que el Aucas lo rechazó en 2005 o cuando en 2008, ya profesional, le dijeron que no lo tendrían en cuenta en el mismo Deportivo Cuenca que luego reclamaría sus servicios y del que es hincha.

Fue allí, en el barrio donde llegó a jugar "partidos por 10 o 20 dólares", que lo apodaron Hormiga. "Me lo pusieron mis amigos porque, dicen, era ligerito como una hormiga. Es un bicho trabajador, sacrificado, que rinde en equipo. Me gusta el sobrenombre", cuenta gran este creyente en Dios, amante de la salsa para bailar y el arroz para comer.

Un título con Deportivo Quito, dos temporadas en el poderoso Barcelona de Guayaquil y el rendir en el seleccionado lo catapultaron a firmar con el Watford incluso antes de Brasil 2014. "Fue una decisión impulsiva, siempre soñé con jugar en Inglaterra. No me arrepiento".

Y eso a pesar de que, tras ser importante en la campaña que le dio el ascenso a la Premier League, perdió la titularidad. "No es una situación fácil, aunque quiero pelearla y seguir aquí", avisa con su habitual espíritu de lucha.

El mismo espíritu que muestra al hablar de sus próximos rivales por la eliminatoria mundialista. "Brasil es durísimo, pero debemos olvidarnos de los nombres y concentrarnos en lo que podemos hacer en el campo. Quito hace tiempo que no es fácil para ellos. Perú, como nosotros, ha crecido y tiene jugadores de buen pie. Saben que no pueden perder más puntos en Lima".

Ir al Mundial es ya una obligación para Ecuador, y los aficionados se lo hacen sentir. "Cambió su mentalidad y es algo bueno, pero también cambió la nuestra, la de los jugadores que estamos en la selección. Está bien, no tenemos porqué achicarnos".

Paredes sabe de qué habla: no se achicó a jugar de lateral y mire hasta dónde ha llegado.