Theerathon Bunmathan escribió un pedacito de historia el año pasado al convertirse en el primer jugador tailandés en ganar la J-League japonesa. Ahora, espera ayudar a Tailandia a alcanzar nuevas cotas durante la fase de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022™, en su intento por disputar al fin la máxima competición futbolística.

Este completo lateral izquierdo, que se encarga siempre de las jugadas a balón parado tanto con su club como con su selección, es un poco el paradigma del futbolista tailandés moderno. Aunque de complexión mediana, Theerathon tiene un corazón inmenso, y goza de una elegante técnica que le ha procurado un papel fundamental en el nuevo animador de la J-League, el Yokohama F Marinos.

El ex seleccionador australiano Ange Postecoglou se trajo al cuadro nipón su inspirado planteamiento ofensivo y no tardó en recoger los frutos, con un título liguero en apenas su segunda temporada (el primero del club en 15 años). Uno de sus primeros fichajes fue Theerathon, que venía de jugar cedido en el Vissel Kobe junto a Lukas Podolski y Andrés Iniesta, tras haber defendido previamente los colores del Muangthong United, uno de los grandes de la liga tailandesa.

Y efectivamente, el lateral se mostró tan brillante como cualquiera de los muchos brasileños que alumbran la primera división japonesa. Theerathon asumió parte del protagonismo en la última jornada de la temporada 2019, en la que el Marinos selló su título, al firmar un gol y una asistencia.

Los futbolistas tailandeses no han jugado con frecuencia en Japón desde la década de 1980, pero la actual hornada que sí lo hace compone la columna vertebral de la selección nacional. El mediático delantero Teerasil Dangda milita en el Shimizu S-Pulse, y el pequeño centrocampista Chanathip Songkrasin luce su rapidez de pies con la camiseta del Hokkaido Consadole Sapporo.

“Jugar en la J-League era mi sueño”, revela Theerathon a FIFA.com. “Había decidido marcharme a Japón si tenía la oportunidad de jugar fuera de la liga tailandesa, en vez de otras opciones atractivas como la liga china o la australiana. Mis experiencias en Japón me han permitido enfrentarme a un desafío mental y desarrollar un espíritu ambicioso. Tardé de dos a tres meses en adaptarme al estilo de juego de la J-League, así como a la cultura japonesa y al clima, ya que se trataba de mi primer fichaje por un equipo extranjero”, explica.

“Al principio veía partidos desde una perspectiva más elevada, en la parte alta del estadio. Eso me ayudó a comprender cuál era la colocación adecuada, el mejor momento para incorporarme a los ataques y los movimientos necesarios, etc. Todo lo que es necesario para jugar aquí… Creo que los jugadores tailandeses pueden tener éxito en la J-League. Algunos jugadores jóvenes tendrán esa oportunidad en el futuro, pero deben entender que será complicado y que tendrán dificultades. Una gran técnica futbolística no es suficiente”, avisa.

La mejoría de Tailandia durante la última década ha sido evidente. Su presencia en los octavos de final de la Copa Asiática 2019 supuso su mejor actuación en 47 años. Es más, la RP China tuvo que remontar un gol adverso para eliminar a los Elefantes de Guerra.

Análogamente, en el camino a Rusia 2018, Tailandia alcanzó la tercera ronda clasificatoria tras quedar por delante de una ex campeona continental como Irak. Y en esa liguilla decisiva, tuvo contra las cuerdas en Bangkok a una selección que acabó logrando el billete mundialista, Australia, antes de que los Socceroos arrancasen un 2-2.

Ahora, los tailandeses están bien colocados para repetir en el camino a Catar 2022, aunque actualmente se encuentran a tres puntos y un punto respectivamente de Vietnam y Malasia en un Grupo G de lo más entretenido.

“Creo que Tailandia está avanzando paso a paso porque algunos jugadores, incluido yo, juegan en ligas competitivas fuera de la liga nacional”, señala Theerathon. “Para ser una selección más potente, lo importante es sacar buenos jugadores de forma constante”.

“Tengo la sensación de que Catar 2022 es mi última oportunidad de acudir a un Mundial”, responde al preguntarle si Tailandia podría clasificarse para la cita mundialista. “No es fácil salir airoso de la fase de clasificación, y nos encontramos en una situación complicada en la presente ronda. Pero intentaré hacerlo lo mejor posible y jugarme el todo por el todo para obtener buenos resultados”.