lunes 30 enero 2017, 09:19

Whiteside, el 'niño' que superó a Pelé

  • El Whiteside sólo había jugado dos partidos en clubes antes de España 1982

  • Rompió el récord de Pelé al convertirse en el jugador más joven de la historia de la Copa Mundial

  • Incluso fue fichado, algo que nadie esperaba de un chico de 17 años

Toda duda que Billy Bingham, el seleccionador de Irlanda del Norte, albergara sobre si conceder la titularidad al jovencito Norman Whiteside, de 17 años, en la Copa Mundial de la FIFA España 1982™, se disipó en cuanto el técnico comprobó de lo que el adolescente era capaz en las sesiones de entrenamiento previas a la competición. Con su imponente presencia física, Whiteside demostró una madurez y una mesura más propias de un profesional veterano que de un novato de su edad, en la concentración celebrada en Brighton justo antes de marchar para España.

Por encima de todo, fue el gol de extraordinaria calidad que le marcó en un partidillo de entrenamiento a Pat Jennings, uno de los mejores guardametas de su generación y casi 20 años mayor que Whiteside, lo que realmente consolidó el puesto del joven talento en el equipo de Irlanda del Norte.

“Muy pocos pudieron ver aquel gol en Brighton”, cuenta el exjugador del Manchester United a FIFA.com. “Me recuerda al tanto de la victoria que anoté en la final de la Copa de la FA en 1985 contra el Everton. Usé a un defensa para impedir que Pat [Jennings] viera el balón y, entonces, lancé un disparo con mucho efecto que rodeó al defensa, por lo que el portero reaccionó demasiado tarde como para llegar a la pelota”.

Fue un gol que cualquier delantero curtido, no digamos un joven de 17 años, hubiera firmado con orgullo, y que causó la admiración de todo el combinado de Irlanda del Norte y de su cuerpo técnico. Claramente, Whiteside estaba listo para su debut internacional, que se produciría en el escenario más importante. Con 17 años y 41 días se convertiría en el jugador más joven que participaba en un Mundial, batiendo con ello el récord que el tricampeón del mundo Pelé había establecido en Suecia 1958.

El jugador

De niño, Whiteside, oriundo de la barriada obrera de Shankill Road (Belfast), llamó la atención de Bob Bishop, el legendario descubridor de talentos del Manchester United, el mismo ojeador que había descubierto a sus compatriotas George Best y Sammy McIlroy. Tras fichar con la cantera del club, el delantero debutó con el United a los 16 años de edad, a finales de la temporada 1981/82.

A pesar de un ascenso meteórico a tan temprana edad, Whiteside no se amilanó y, justo dos días después de cumplir los 17, hizo alarde de aplomo en su debut en Old Trafford, donde marcó un gol. Hasta hoy, posee la distinción de ser el futbolista más joven que ha marcado un gol con el equipo absoluto del Manchester United.

Después de convertirse en el jugador que con menos edad ha disputado el Mundial y de disfrutar de la titularidad en los cinco partidos de Irlanda del Norte en España 1982 -incluido el de la histórica victoria por 1-0 contra la anfitriona, España, donde los modestos norirlandeses se clasificaron para la segunda ronda de grupos-, Whiteside volvería a representar a su país en la máxima competición del fútbol cuatro años después, en México 1986. Entre las dos ediciones mundialistas, Whiteside disfrutó de varios éxitos y ganó la Copa de la FA con los Diablos Rojos, en cuya final de 1985 marcó ese célebre gol de la victoria en la prórroga contra el Everton. También triunfó con su país en el British Home Championship en 1984.

Después fichó por el Everton en 1989, pero su carrera se paró en seco por culpa de una cruel lesión, y se vio obligado a colgar las botas en 1991, con sólo 26 años. Después del fútbol, Whiteside se hizo podólogo, abrió su propia clínica en Manchester, y hoy en día sigue trabajando en Old Trafford en el sector de la hospitalidad corporativa.

El récord

Valentía, técnica y habilidad para disparar el balón con veneno son las características que exhibía Whiteside con el Manchester United hacia finales de la temporada 1981/82 y que llamaron la atención al seleccionador nacional Billy Bingham. Si bien este veterano del Mundial de 1958 tenía planeado llevarse al joven Whiteside de 17 años a España 1982 como parte de la lista de 22 convocados, con la idea de darle algún que otro minuto, Bingham cambió de opinión cuando vio a Whiteside en acción en los entrenamientos anteriores a la competición.

“Pensaba en él como una de las opciones para llevarme [a España], pero no tenía ni idea de si iba a hacerle jugar. Nos concentramos un par de semanas en Brighton, y me encontré con un jugador sobresaliente en los partidillos de entrenamiento”, explicaba Bingham en 1986. “Para la segunda semana [de la concentración], ya había decidido que lo iba a poner en el once inicial. Comprobé que, a sus 17 años, poseía la madurez de un futbolista de 26”.

Los recuerdos

“La primera alusión a que me llamarían de la selección de Irlanda del Norte para participar en el Mundial de 1982 la recibí de Jim McGregor, quien era el fisio del Manchester United y también del combinado norirlandés.

Me dijo que Billy Bingham, el seleccionador, había asistió a unos cuantos partidos de los reservas del United para verme. Nuestro entrenador de los juveniles en el United, Eric Harrison, también me decía cosas como: ‘Sigue trabajando así de bien y llegarás a ir a España con Irlanda del Norte’. No me di por enterado, pero luego recibí la carta oficial enviada al Manchester United, que anunciaba mi convocatoria para el combinado nacional.

Por entonces no sabía si entraría en el once inicial en España 1982. Sencillamente, era un honor formar parte de la selección. Sin embargo, me favoreció el buen rendimiento que ofrecí en la concentración de preparación para el Mundial, en Brighton.

Cuando supe que iba a debutar internacionalmente en un Mundial, ni me inmuté, lo asumí perfectamente. Los demás estaban más nerviosos por mí que yo mismo. Los jugadores más mayores, como Martin O’Neill, Pat Jennings o Sammy McIlroy, me desearon buena suerte antes del partido, pero creo que sabían perfectamente que aguantaría la presión.

Me acuerdo de estar cantando el himno nacional durante el partido [contra Yugoslavia] y también de que me amonestaron, de manera que me convertí en el jugador más joven de la historia que ha recibido una amonestación en una fase final del Mundial.

Quitarle a Pelé el título de futbolista más joven que ha aparecido en un Mundial fue algo soberbio. Lo más impactante que recuerdo es que los periodistas de todo el mundo me hacían preguntas, y yo trataba de responderlas después de que hablaran en sus respectivos idiomas, pero era complicado seguir el hilo, porque me olvidaba continuamente de lo que me habían preguntado.

Y después, en España 1982, nos impusimos a la nación anfitriona en la fase de grupos. Fue un partido fabuloso, que tuvo de todo. El ambiente era increíble, y en una esquina teníamos a los seguidores norirlandeses, tan vocingleros y entregados como siempre. Nos quedamos en inferioridad numérica tras la expulsión de Mal Donaghy, pero todos empujamos a una y arrancamos una histórica victoria por 1-0”. Norman Whiteside