Por Laure James, con Inglaterra

Polivalencia, velocidad y olfato para el gol están ayudando a Harry Maguire a convertirse en un nombre conocido en todo el mundo. El ágil defensa ha exhibido rapidez y técnica con el balón en los pies y seguridad en sí mismo para incorporarse a las ofensivas de su equipo, junto con una gran solvencia en la zaga de tres hombres que utiliza Inglaterra.

Sin embargo, al igual que muchos otros que están contribuyendo al éxito de los Tres Leones en la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™, este joven de 24 años está conquistado los corazones de toda una nación por su modestia y su afable personalidad.

El pasado agosto, Maguire se presentó a su primera convocatoria con las botas metidas en una bolsa de basura. Ahora ha derrochado buen humor en un tuit publicado tras la victoria en cuartos de final sobre Suecia, un guiño a su interesante elección de bolsa de deporte.

En el tuit, ilustrado con una foto de sí mismo hablando con su pareja, Fern Hawkins (una imagen convertida ya en todo un meme), el defensa propone a Hawkins que pida a los vecinos el favor de sacarles la basura esta semana, puesto que no van a regresar a casa todavía. “Todo obra mía”, comenta Maguire entre risas mientras se sienta a conversar con FIFA TV.

Maguire se curtió en la segunda categoría de la liga inglesa con el Sheffield United. A continuación jugó en el Hull City, desde el que fichó por el Leicester, el club con el que la pasada temporada disputó todos los minutos en la Premier League.

Desde su primera concentración con la selección, donde, según cuenta, a su madre no le gustó nada verlo llegar con una bolsa de basura (después envió un texto a su hijo en el que le preguntaba: “¿A qué viene eso de la bolsa de basura?”), hasta marcar en los cuartos de final de un Mundial, una cosa permanece inalterable: el espíritu de equipo de Inglaterra.

“Es importantísimo para nosotros", asegura Maguire. "Como grupo somos una piña. Desde nuestra primera concentración, Gareth ha reiterado la importancia de que el grupo permanezca unido contra viento y marea. Creo que en estos momentos estamos cumpliendo con su deseo a la perfección. Como colectivo, nos sentimos felices y hemos conseguido que esa alegría, esa felicidad, se note sobre el terreno de juego”.​